El convulso Líbano marca la Mostra de Cinema Àrab
El país es el invitado a la muestra que del 6 al 10 de noviembre se celebra en la Filmoteca de Barcelona
El Líbano fue durante años la Suiza del Oriente Próximo. La guerra fratricida entre musulmanes y cristianos que estalló en 1975 derrumbó el oasis. Décadas más tarde, ese pequeño país fronterizo con Siria, Israel y el Mediterráneo se recuperó y Beirut volvió a ser destino turístico, aunque hoy los conflictos armados de sus vecinos siguen sacudiéndolo. Un contexto convulso y un terreno muy fértil para hallar historias individuales y colectivas, todas marcadas por las mil heridas de la guerra. Por eso el Líbano es el país invitado de la VII Mostra de Cinema Àrab i Mediterrani de Catalunya que, del 6 al 10 de noviembre, exhibirá en la Filmoteca de Barcelona películas y documentales que quieren abrir las puertas de la memoria del mundo árabe.
Serán ocho filmes de firma libanesa, argelina, palestina y egipcia, la mayoría producidos el año pasado, pero también con la estrena de L'hivern del descontentament. El largometraje de Ibrahim El Bautot, elegido para representar a Egipto en los próximos Oscar, refleja la crudeza y la violencia de los últimos días del régimen de Mubarak, con las protestas de la plaza Tahrir como fondo y todo envuelto en una atmósfera surrealista y preñada de terror. Del país invitado destaca el documental Nits d'insomni, que explora los rastros de la guerra civil y se cuestiona si, tras el sufrimiento, la redención y el perdón son posibles. Su directora, Eliane Raheb, será una de las invitadas.
Se proyectarán ocho filmes de firma libanesa, argelina, palestina y egipcia, la mayoría producidos el año pasado
El conflicto libanés terminó en 1990 y durante la reconstrucción sus clases dirigentes trataron de fomentar el olvido; no fue hasta más tarde que emergió una oleada de nuevos cineastas dispuestos a hablar de sus heridas y filmar su pasado. Las películas libanesas que se proyectarán en la Filmoteca tienen aquella guerra como hilo conductor. “Sin hacer comparaciones, a la sociedad catalana y española también le suenan las palabras guerra civil, memoria, desparecidos, impunidad, injusticia”, lanza la directora de la muestra, Meritxell Bragulat.
La muestra se inaugura hoy con Petites guerres, filme de 1982 que recrea la historia de amor en el Beirut de los primeros meses del conflicto. Este fue el filme más famoso de Maroun Bagdadi (1950-1993), el director homenajeado en la presente edición. Su viuda, la reconocida bailarina y coreógrafa libanesa Souraya Baghdadi, protagonizó la película y será otra de las invitadas de la Mostra. Otra produccion del Líbano que se exhibirá será el documental de Maher Abi Samra Érem comunistas, seguido de un debate entre el arquitecto y antiguo miembro del Partido Comunista Libanés Bachar Abdel Samad y Pepe Gutiérrez-Álvarez, vicepresidente de la Fundació Andreu Nin. Por último, Beirut, la trobada, dirigida por Borhan Alaouié, volverá a llevar a la pantalla la experiencia de la guerra a través de varias historias reales.
La lucha anticolonial y la independencia de Argelia también tendrán su rol. Será de la mano de Zabana!, drama histórico de Saïd Ould Khelifa realizado en 2012 con motivo del 50 aniversario de la emancipación del país. Según Bragulat, la difusión de filmes como los proyectados durante los cinco días es importante porque “rompen la imagen del mundo árabe que se nos lleva vendiendo desde Occidente, llena de prejuicios y estereotipos de los excolonialistas”. Y es que el cine es una buena herramienta para despertar el espíritu crítico de la sociedad, “tiene una gran capacidad de impacto y te suscita preguntas”.
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