La Ribeira Sacra apunta a la Unesco

Galicia podría engrosar su presencia en la lista de maravillas declaradas Patrimonio de la Humanidad. La Diputación de Ourense acaba de reactivar una vez más la candidatura de la Ribeira Sacra para ser declarada Patrimonio de la Humanidad. El presidente ourensano, Manuel Baltar, aseguró esta mañana que "los principales valores que tiene este geodestino, que merece ser reconocido con tan singular distinción, son la excepcionalidad turística y paisajística entre dos provincias". Y es que este espacio en torno a los cañones del río Sil aglutina más de medio millar de bienes catalogados, entre ellos nueve monasterios, 203 iglesias, 121 capillas, 16 pazos, 25 torres, cinco puentes, diez ermitas, cinco prioratos o tres santuarios. La candidatura busca desde hace tiempo un reconocimiento conjunto de todos los valores patrimoniales, paisajísticos, culturales y medioambientales situados a medio camino entre las provincias de Lugo y Ourense.

La idea no es nueva. Lleva atascada 17 años entre anuncios políticos, trámites administrativos y declaraciones de intenciones que se quedan simplemente en eso. La Ribeira Sacra es la propuesta más antigua de la lista “indicativa” española de “bienes y sitios excepcionales” que el Gobierno central elabora para la Unesco  con el fin de obtener este reconocimiento internacional. El 17 de julio de 1996, el Ministerio de Asuntos Exteriores registró la propuesta “The Ribeira Sacra, Lugo and Ourense” por primera vez y allí quedó hasta la fecha.

Durante la última década varias instituciones de la comunidad han intentando reflotar la idea. En 2004, el exconselleiro de Cultura del PP, Jesús Pérez Varela, anunció la puesta en marcha de un plan director que incluía su apuesta por este reconocimiento internacional, “estando en condiciones de obtenerlo a finales de 2005”. Ocho años después la Ribeira Sacra sigue esperando. El presidente de la Diputación de Lugo, José Ramón Gómez Besteiro, anunció en junio de 2011 su intención de reimpulsar la candidatura ante la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, sin embargo nunca más se supo. Incluso, el valedor do pobo, José Julio Fernández Rodríguez, puso en marcha el pasado mes de agosto dos iniciativas que tienen como objetivo tratar de agilizar los trámites.

Baltar se ha reunido este lunes con los alcaldes de los ocho ayuntamientos ourensanos que forman parte del consorcio de turismo de la Ribeira Sacra (A Peroxa, A Teixeira, Castro Caldelas, Esgos, Montederramo, Nogueira de Ramuín, Parada de Sil y Xunqueira de Espadañedo) y ha anunciado que se entrevistará esta misma semana con responsables de la Xunta, con la intención lograr la declaración internacional de la Unesco “en cuestión de meses”. Además ha señalado que se pone a disposición de la Administración central y de los ayuntamientos de Lugo implicados para que la cooperación sea “máxima”. Pero la candidatura deberá superar un importante escollo: las centrales hidroeléctricas -existentes y proyectadas- que salpican el río Sil.

Un vocal del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (Icomos), el organismo encargado de inspeccionar las candidaturas, ya alertó en 2009 que estos macroproyectos eléctricos de Iberdrola y Gas Natural-Fenosa "no consolidan la candidatura y no favorecen el reconocimiento perseguido”. Y parece que el aviso no surtió efecto. Actualmente se están tramitando o construyendo cinco proyectos hidroeléctricos en la zona que pretende ser premiada con este distintivo, algunos de ellos descomunales. Por ejemplo, Fenosa presentó hace dos años ante la Confederación Hidrográfica, un plan para horadar el cañón del Sil con cinco kilómetros de túneles necesarios para instalar una central reversible bajo tierra capaz de producir tanta energía como un reactor nuclear.