Mercasevilla hace efectivo el ERE y despide al 85% de su plantilla

Mercasevilla hizo ayer efectivos los despidos previstos en el expediente de regulación de empleo (ERE) puesto en marcha por la empresa, que ha reducido la plantilla en un 85%. Desde ayer, la plantilla la componen 28 trabajadores, frente a los 179 con los que contaba hasta ahora. El ERE pactado suponía dejar fuera a 129 empleados (107 indefinidos y 22 temporales) si bien, según el comité de empresa, finalmente han sido 128 las cartas de despido notificadas hasta el momento.

Buena parte de los despidos están directamente relacionadas con la liberalización de los servicios que se prestan en la lonja de pescado, que también entró ayer en vigor. Este cambio obedece a una modificación aprobada por el Ayuntamiento sobre la normativa del mercado central para adaptarse, según el gobierno municipal de Juan Ignacio Zoido, a las exigencias europeas, supuestamente contrarias al monopolio que tenían hasta ahora los trabajadores de Mercasevilla para prestar los servicios de carga, descarga y facturación a los mayoristas.

Con el cambio vigente desde ayer, el mercado abre estas labores a la libre contratación por parte de los mayoristas. Estos han asegurado en los últimos días que su intención es contratar para las labores de carga y facturación a parte de los empleados afectados por el ERE, lo que daría empleo a entre 40 y 60 de los trabajadores ahora despedidos.

Pero los representantes de la plantilla desconfían de las intenciones de los mayoristas y recelan de los datos definitivos del ERE aportados por el Ayuntamiento, socio mayoritario de Mercasevilla. Según el presidente del comité de empresa, Rafael Domínguez (CC OO), las cifras “no cuadran” como consecuencia de la “improvisación” con la que, según asegura, ha sido elaborado y tramitado el ERE.

Este es el tercer ERE que pone en marcha el mercado central de Sevilla en la última década. Los dos anteriores se llevaron a cabo en 2003 y 2007 y el pago de las indemnizaciones todavía colea. En el segundo de los expedientes se detectó al primer intruso que dio origen al caso de los ERE fraudulentos que investiga la juez Mercedes Alaya.