Trias resiste el tirón electoral de Esquerra Republicana en Barcelona

A diferencia de lo que los sondeos auguran en la Generalitat, CiU resiste electoralmente en Barcelona y no hay un sorpasso de ERC. Ayer, el Consistorio presentó su barómetro semestral, coincidiendo con el segundo aniversario de la llegada de los nacionalistas al poder en la capital catalana. Las estadísticas siguen situando a la federación como primera fuerza en intención de voto (18%, tres puntos más de lo que obtuvo en las elecciones municipales de 2011), al alcalde Xavier Trias como el único líder que aprueba y se mantiene la aceptación de la gestión municipal. El primer teniente de alcalde Joaquim Forn aprovechó para sacar pecho por los resultados. Según él, constata “el cambio tranquilo” que ha experimentado la ciudad y el “liderazgo claro del alcalde”.

El panorama de la intención de voto en Barcelona no ha variado radicalmente desde la pasada ola, en diciembre del año pasado. Unitat per Barcelona (UpB, coalición donde está ERC) pierde apoyos pero continua segunda en intención de voto con 10%; seguida por Iniciativa (6,6%); el PSC (6,1%); el PP (2,1%). También hay 19,8% de indecisos. Estos datos provienen de 800 encuestas telefónicas se realizaron entre los pasados 11 y 17 de junio y tiene un margen de error de 3,46%. Según el último CEO, ERC obtendría 22% de voto en el Parlament de Cataluña. CiU, el 18,2.

En el Ayuntamiento, el PSC se queda en el cuarto lugar en intención de voto aunque sube 1,4 puntos, una cifra similar a la que bajan los ecosocialistas, los terceros en la lista. El mayor retroceso con respecto al sondeo de diciembre del año pasado lo sufre las CUP, que pasa de 4,2% a 0.9%.

El presidente del grupo socialista, Jordi Martí, es el líder con menos conocimiento en el Consistorio, un 33%. Ricard Gomà (ICV-EUiA) tiene el 39,3%, Alberto Fernández Díaz (PP) es conocido por el 74,1% de los consultados y Jordi Portabella (UpB) tiene el 75,8%. Al alcalde lo conocen nueve de cada diez encuestados y es el único que no suspende, con un 5.1 de calificación. Fernández Díaz saca la peor nota, 3.3.

La valoración de la gestión del Consistorio mejora. Un 42,8% la califica de muy buena/buena; el 25,9% de normal y 25,5% de muy mala/mala (seis puntos menos que en el anterior barómetro). Unos resultados muy en la línea del pasado mandato, algo que Màrius Boada, director del servicio de estudios del Consistorio, considera normal teniendo en cuenta que “lo que el ciudadano califica son los servicios y estos no han cambiado mucho”.

El paro, los problemas económicos y la inseguridad son las tres mayores preocupaciones de los barceloneses. El barómetro también preguntó por el impacto de la celebración de grandes eventos en la ciudad, como el Congreso de los Móviles, el Sónar o los X Games. Ocho de cada diez de los encuestados consideran que afectan muy positivamente o positivamente a la ciudad. Forn aseguró que este apoyo “justifica” que el Ayuntamiento destine cuatro millones de euros al Circuito de Montmeló, donde se corre la F-1. Sin embargo, la percepción sobre la riqueza que estos eventos generan no es amplia. El 80,6% de los encuestados aseguran que estos eventos no tienen ningún efectos en los ingresos de su hogar.

El PP criticó una vez más que el barómetro “distorsione” la realidad de la intención de voto. Sus votantes siguen siendo renuentes a manifestarlo en las encuestas. El PSC e Iniciativa consideran “muy justo” el aprobado del alcalde. UpB celebró que “las dos primeras fuerzas quieran el estado propio”.