El Gobierno constata una “menor incidencia” que en septiembre

El consejero de Empleo, Juan María Aburto, ha informado este mediodía en el Parlamento de las cifras que ha recopilado el Gobierno durante la mañana de la primera huelga convocada con el PNV de nuevo en el Ejecutivo.

Aburto ha señalado que en el sector privado ha habido un seguimiento del 18,7%, muy desigual entre provincias. Así, en Gipuzkoa el seguimiento ha sido del 43,1%, mientras que en Álava los datos se reducen al 11,5% y en Bizkaia se ha registrado el menor seguimiento, del 10,8%. El consejero ha recordado que en la última huelga convocada por ELA y LAB, en septiembre del 2012, el seguimiento en el sector privado fue del 20%, por lo que ha concluido que la "incidencia de esta huelga ha sido menor".

La misma conclusión es la que el Ejecutivo ha sacado de la huelga en el sector público. En la administración general vasca, el 22,31% de los trabajadores no ha acudido hoy a su puesto de trabajo, un porcentaje inferior al registrado el pasado septiembre, cuando el 29,84% secundó la huelga. En las diputaciones, Álava ha notificado un seguimiento del 15,2% y Bizkaia un 14,4% -en septiembre en esta última fue del 21,5%-, mientras que Gipuzkoa no ha aportado datos porque "hasta mañana" no los difundirá, tal y como ha indicado Aburto. En general, Aburto ha indicado que la huelga en el sector público se encuentra en torno al 20% frente al 25% de septiembre.

El Departamento de Educación ha remitido además un comunicado en el que, con cifras de la una del mediodía y habiendo analizado la situación del 73% del profesorado de la etapa no universitaria en la enseñanza pública, ha fijado el seguimiento de la huelga en el 41% de los puestos analizados, el 30% del profesorado total.

El consejero ha valorado que los "incidentes no están siendo la noticia" en una jornada en la que, según las cifras aportadas del Departamento de Seguridad, se ha identificado a 18 personas por amenazas contra otros trabajadores y se han registrado daños materiales en distintas empresas. Asimismo, Aburto ha constatado la existencia de piquetes "especialmente activos contra algunas firmas". Pese a la ausencia de incidentes de carácter grave, el consejero ha señalado que "no podemos hablar de normalidad cuando ha habido agresiones y daños materiales", y se ha solidarizado con las empresas y los trabajadores que los han sufrido.

Aburto ha insistido en que "solo quedan 38 días" para llegar a la fecha marcada en rojo en muchos calendarios, el 7 de julio, fecha en la que entrará en vigor el fin de la ultraactividad, lo que en la práctica supondrá, si no se logran soluciones antes, el empeoramiento de las condiciones laborales de miles de trabajadores vascos que se encuentran con sus convenios laborales prorrogados. Aburto ha indicado que ese día los ciudadanos "examinarán a cada una de las partes [sindicatos, patronal y Gobierno] y verán qué ha hecho cada una para resolver una situación que se puede transformar en delicada".

En este sentido, ha censurado el "marcado carácter político" de esta convocatoria, "convocada desde la izquierda abertzale", y se ha preguntado qué es lo que cambiará la huelga para las jornadas siguientes. "¿Qué convenio va a estar desbloqueado mañana?", ha insistido, "¿para qué va a servir al fin de la ultraactividad?".