El naval ferrolano planta fuego ante la sede local del PP

Un patíbulo de madera ardió hoy ante la sede local del PP. En la horca y con la soga al cuello, dos monigotes con traje y cortaba y sendos carteles al cuello: 'Flotel, culpable' y 'Dique, culpable'. En la cabeza llevaban estampadas las caras recortadas de dos políticos. Uno, el presidente de la Xunta, Alberto Nuñéz Feijóo. A su lado, avivado con gasolina para que la lluvia no aguase las llamas, se consumió un monigote del alcalde, José Manuel Rey Varela, también del PP.

Furiosos e indignados por promesas inconcretas y prácticamente sin carga de trabajo en los talleres, los trabajadores del naval en la ría de Ferrol han elevado el nivel de sus protestas callejeras hasta la combustión. Se sienten “engañados” y “abandonados” por las tres Administraciones: la central, propietaria de los astilleros de Navantia; la autonómica, que comprometió hace siete meses un flotel del que nada saben; y la local, a la que acusan de darles la espalda aunque el naval es el motor económico de una ciudad que bate récords de paro con un tercio de la población (32%) desempleada.

Unos 2.500 operarios de Navantia salieron del astillero ferrolano para manifestarse por las calles del centro y dejarle un recado ardiente al partido que gobierna en Madrid, la Xunta y en la ciudad. La protesta desfiló brevemente por la delegación administrativa de la Xunta pero el punto álgido se escenificó en plena calle Rubalcava, donde curiosamente tiene su sede el PP ferrolano.

Es la enésima protesta de la plantilla directa y auxiliar de unos astilleros públicos que ven peligrar su futuro mas allá del verano, cuando entregan el último buque a Australia. El Comité de Empresa ha contabilizado más de 2.200 despidos entre la red de subcontratas del naval desde septiembre del 2011, fecha en la que empezaron a movilizarse para exigir nuevos contratos militares. Hace meses que esperan la fecha para el inicio de un flotel -buque hotel de apoyo a las plataformas petrolíferas- comprometido el pasado otoño por la Xunta para Pemex que todavía no se ha definido. También le han reclamado por carta a Feijóo que los reciba con urgencia para aclarar las dudas que ha sembrado en las factorías de Ferrol y Fene la compra de Barreras por parte de la petrolera mexicana.

“Son gobiernos de tebeo”, criticó el portavoz del Comité de Ferrol, Ignacio Naveiras, de CCOO, para calificar a los Ejecutivos central, autonómico y local. Los sindicatos reparten culpas y señalan a la dirección de la empresa a la que se han escapado en pocos meses dos buenos contratos con Noruega y Tailandia, mientras “derrochan” dinero de las arcas públicas. Fue un paro laboral de dos horas que finalizó con la plantilla desandando el camino hacia la factoría. Volverán a manifestarse el 30 de mayo. El mismo día prevén acudir al pleno de fin de mes en el que ya irrumpieron el mes pasado y que se pospusó porque una multitud de colectivos de lc ciudad con decenas de reivindicaciones (trabajo, casas, participaciones preferentes o nóminas atrasadas) abarrotaba el consistorio.