_
_
_
_
_

El socialista que ama los mercados

Lucena presenta ‘En busca de la pócima mágica’ en el Círculo de Economía

Lluís Pellicer
Pere Navarro y el portavoz del partido, Maurici Lucena, en el Parlament.
Pere Navarro y el portavoz del partido, Maurici Lucena, en el Parlament. Toni Garriga / efe

Maurici Lucena confesaba ayer que entre sus compañeros del PSC le ha costado algún disguto defender la economía de mercado “como el mejor de los sistemas”. O lo que es lo mismo, “es el peor de los sistemas con excepción de los demás”. El actual portavoz parlamentario de los socialistas lo contaba ayer en la presentación de su libro En busca de la pócima mágica (Antoni Bosch) en el Círculo de Economía y ante varios dirigentes y diputados de su partido, empezando por el secretario general, Pere Navarro.

Además de representantes de casi todos los grupos parlamentarios, el público estaba poblado de directivos y empresarios, que acogieron con satisfacción un discurso que abogaba por que la intervención pública estuviera siempre “muy justificada”. Lucena consideró que hay “buenas razones para que el gobierno refuerce la competitividad de las empresas”, pero advirtió de que la “guía fundamental” de la “intervención pública” debe basarse en “las señales que envía el mercado”. La intervención, razonaba, solo debe darse por una mala asignación de los recursos y por las desigualdades que esta puede generar. Y quien asigna los recursos en primera instancia, claro está, es el mercado. En política industrial —que es lo que aborda el libro— apostó por una intervención para impulsar “proyectos de calidad”, con independencia del sector del que se trate. Algo que vino a respaldar el consejero de Economía, Andreu Mas-Colell. “¿Quien iba a decirnos hace 25 años que Cataluña hoy sería gastronomía, piscinas y sangre?”, se preguntó.

Además de Mas-Colell, avalaban el libro de Lucena el catedrático y expresidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) Julio Segura, el exministro de Economía y Hacienda Carlos Solchaga. Solchaga sostuvo que el libro era de lectura obligada para concejales, parlamentarios y ministros en ejercicio. Y tras lamentar la formación de algunos políticos, soltó: “Es más fácil destacar en política, basta ver quien destaca, que en la academia”. Mas-Colell ironizó y dijo que tras el primer libro suelen llegar varios. Y si bien dijo que con esta obra está de acuerdo, con las próximas —en las que podría “salir mal parado”— tal vez eso ya no sea así.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Lluís Pellicer
Es jefe de sección de Nacional de EL PAÍS. Antes fue jefe de Economía, corresponsal en Bruselas y redactor en Barcelona. Ha cubierto la crisis inmobiliaria de 2008, las reuniones del BCE y las cumbres del FMI. Licenciado en Periodismo por la Universitat Autònoma de Barcelona, ha cursado el programa de desarrollo directivo de IESE.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_