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De la proximidad a ‘Victus’

Los autores locales venden más en Girona y Lleida y Sánchez Piñol se impone en las tres provincias

Paradas de libros en la ciudad de Girona.
Paradas de libros en la ciudad de Girona.PERE DURAN

Sol y temperaturas agradables fueron los principales aliados de Sant Jordi en Tarragona, Girona y Lleida. El tiempo y también las ganas de aparcar la crisis y los problemas —por lo menos durante unas horas—movieron a miles de personas a pasear entre casetas y comprar libros y rosas en una proporción similar a la del año pasado. Victus, de Albert Sánchez Piñol, fue el libro más vendido en las tres provincias.

» Tarragona. La Rambla Nova fue el punto neurálgico de la Diada de Sant Jordi, en la que están la mayoría de las 139 paradas, y la que concentró a los compradores. Entre los títulos que más se vendieron triunfaba Victus, de Albert Sánchez Piñol, y, a cierta distancia, Brúixoles que busquen somriures perduts, de Albert Espinosa, contaba Pitu Rovira, presidente del Gremio de Libreros de Tarragona y socio de la librería La Capona. Entre los más solicitados también hubo dos títulos locales; una panorámica de fotos y postales antiguas de la ciudad y una cronología de los comercios de la Rambla.

“Mi percepción es que están funcionando más o menos como el año pasado, Sant Jordi es un día muy especial, hace buen tiempo y la ilusión pasa por encima del presupuesto, si la gente se puede gastar 25 euros no los escatima”, cuenta Rovira. En algunos puestos de entidades podían comprarse ejemplares a un euro o intercambiarse libros. Y las rosas de todos los tipos y texturas: de chocolate, de madera, de globos, pintadas con los colores del arco iris, rosas acompañadas de poemas por dos euros.

» Girona. “En Sant Jordi no hay crisis, es un día extraordinario, es el Barça-Madrid, miles de personas salen a la calle, aunque mañana ya no venga nadie”. Así definía Guillem Terribes, uno de los libreros con más historia de Girona, el día del libro y de la rosa. La Rambla y la Plaça Catalunya concentraron la mayor parte de los 200 puestos de libros, rosas y elementos identitarios. Los grandes protagonistas de la jornada, los autores locales y la rosa roja. Una prolífica lista de autores locales ha destacado en este Sant Jordi de forma inusual por encima de otros nombres.

Los más solicitados: Josep Maria Fonalleras y Gerard Bagué con sus obras Climent y La Girona Pecadora, respectivamente. Y fuera del ámbito local, las grandes ventas fueron para Albert Sánchez Piñol y su Victus, y las Brúixoles que busquen somriures perduts, de Albert Espinosa, y Sílvia Soler también ha tenido su día de gloria con la premiada L'estiu que comença.

» Lleida. Pese a la crisis, un 10% más de paradas que el año pasado. 200 casetas vendieron libros y rosas en el centro de la ciudad. Sant Jordi aparcó la crisis momentáneamente a juzgar por el número de libros vendidos, entre 15.000 y 20.000 según el gremio de libreros, una cifra similar a 2012. La calle Major y el eje comercial, fue la zona más animada de una Diada que se inició con un almuerzo literario en la sede de la editorial de Pagès Editors, que reunió a unos 40 autores locales.

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Venta de libros ayer en las calles de Lleida.
Venta de libros ayer en las calles de Lleida.HERMÍNIA SIRVENT

Los libros más vendidos fueron Victus, de Albert Sánchez Piñol, Brúixoles que busquen somriures perduts, de Albert Espinosa, La reina descalza, de Ildefonso Falcones, y La ira del Fénix, de Rafa Melero. Y entre los autores locales tuvieron éxito Vidal Vidal, con La meitat de zero; Francesc Pané, con Emocions contra la mandra; Quim García Albero, con El llibre del llamp y Josep Vallverdú, con Terra de llops.

Esta información ha sido elaborada por Mercè Pérez, Marta Rodríguez y Lluís Visa

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