La Fiscalía denuncia a los sindicatos de prisiones por bloquear la Modelo
El ministerio acusa a cuatro representantes de los trabajadores y 20 funcionarios
Los responsables de prisiones de cuatro sindicatos —CC OO, CATAC, UGT y CSIF— y 20 funcionarios más se enfrentan a una denuncia de la Fiscalía. El ministerio público considera que pusieron en peligro la seguridad de La Modelo en diciembre de 2011, cuando bloquearon los accesos e impidieron el relevo de los turnos de noche en una protesta por los recortes que está aplicando el Gobierno de Artur Mas. El fiscal Fernando Rodríguez Rey pide la imputación de todos ellos por cuatro delitos: de coacciones, de abandono del servicio público, de denegación de auxilio a la Administración de Justicia y de imposición de privaciones indebidas a los internos.
La denuncia detalla que los sindicatos “lideraron” y “encabezaron” la actuación. La movilización empezó a las 7.30 del 2 de diciembre de hace dos años, cuando “un numeroso grupo de personas se concentraron en las puertas” de la prisión barcelonesa. Era el momento del relevo del turno de noche. Dentro se encontraban 15 funcionarios más los responsables del centro. Una dotación que “resulta totalmente insuficiente para afrontar el funcionamiento ordinario del centro durante el día”, asegura la denuncia del ministerio público.
“La concentración bloqueó intencionadamente el acceso al interior del centro”. En total, 203 funcionarios no pudieron incorporarse. “Sólo 24 trabajadores [...] pudieron sortear el bloqueo e incorporarse en distintos momentos a lo largo de la mañana”. Una situación anormal que se prolongó hasta las cuatro de la tarde.
A resultas de esa acción, un informe de la dirección de la prisión citado por la fiscalía sostiene que no se garantizó la seguridad en el interior. Los internos permanecieron encerrados en sus celdas, se anularon las visitas familiares del día, no se abrieron los locutorios de los abogados, no funcionaron los talleres ni las escuelas, y se suspendieron el resto de servicios habituales de la prisión, como lavandería, economato o atenciones médicas no urgentes.
Tampoco se pudieron trasladar los internos a los juzgados, lo que supuso la anulación de 12 juicios, 28 ruedas de reconocimiento y dos visitas al médico forense. Además, debido a la “crispación” los presos “golpearon repetidamente las puertas de las celdas”, vertieron “gritos y amenazas contra los funcionarios”, se quemaron papeleras en los patios y se arrojó agua por debajo de las puertas de las celdas. “Un grupo de internos amenazó con autolesionarse cortándose las venas”, asegura el informe del director. La protesta acabó a las 14.00, con una carga de los antidisturbios.
La fiscalía pide que se tome declaración a las personas que ha logrado identificar en calidad de imputados y destaca que los representantes sindicales se negaron a declarar en sede policial durante la investigación de lo sucedido. También pide que se escuche en calidad de testigo al director de La Modelo, Ramón Parés. Este, tras los incidentes, aseguró que llegó a temer que se produjesen muertes en la prisión. El bloqueo, sin embargo, no causó heridos.
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