La industria del metal modera su caída pero aún perderá empleo

La industria del metal valenciana, una de las más importantes del territorio y la que suele hablar más claro, moderó la caída de su actividad productiva en el último trimestre de 2012, con una disminución del 1,6% frente al descenso del 8,3% que experimentó en el mismo periodo de 2011. Las previsiones están lejos, sin embargo, de ser optimistas.

La confianza de los empresarios sigue por debajo de los cinco puntos sobre 10 (un 4,4) por sexto trimestre consecutivo, y se halla en niveles de 2009. La previsión de inversión está por los suelos (-45,1 puntos en un índice que va de -100 a +100). Y las compañías adelantan que el empleo en el arranque de este año irá, en todo caso, a peor: el 28,5% de los empresarios sondeados por su patronal prevén reducir la plantilla mientras el 68% contemplan mantenerla.

El presidente de la patronal del sector (Femeval), Vicente Lafuente, ha enviado un duro mensaje sobre el punto en el que se encuentran los responsables políticos: "El intento de los gobernantes de clarificar una gestión sombría e imprudente de los recursos públicos", ha afirmado, "ha desplazado a un segundo término el debate sobre el modelo productivo deseable para nuestra economía". Lafuente ha alertado del proceso de "desindustrialización y destrucción de empleo que afecta a España desde hace cuatro años" sin que se acometa "un pacto urgente por la industria" y sin que las Administraciones respalden a las empresas del sector, ha agregado.

Algunos indicios apuntan a un cambio de tendencia, al menos en lo que al peor comportamiento de las empresas valencianas respecto a las de España: a lo largo de 2012 la actividad productiva de la industria del metal cayó un 4,8% en la comunidad autónoma y un 7,5% en el conjunto del Estado. Aunque los datos de exportación son negativos (un descenso del 12,4% en los 11 primeros meses de 2012), algunos países han experimentado aumentos muy notables, como Estados Unidos (con un aumento del 110%).

El descenso de las exportaciones de vehículos, que la patronal calcula en un 30%, se ha visto parcialmente compensado por fuertes incrementos en subsectores como el de las máquinas y artefactos mecánicos, con un 34% más de ventas al exterior.