Unió fulmina a Torramadé

El caso Torramadé que afecta a Jaume Torramadé, presidente de la Diputación de Girona acusado por una excolaboradora de acoso sexual, tomó este miércoles velocidad de crucero. Tras semanas de movimientos muy calculados y una prudencia extrema de todos los que tenían algo que decir sobre el escándalo, se ha abierto la caja de los truenos y las decisiones “temporales” empezaron a convertirse en “definitivas”. Y el comité ejecutivo de Unió Democràtica en Girona destituyó a Torramadé del cargo de presidente.

Sin la confianza de su propio partido, sus días al frente del organismo provincial parecen contados. Tanto el PSC como ERC pidieron a CiU que resuelva cuanto antes la situación e impidan que Torramadé vuelva a presidir la institución.

Si en un principio fue él quien se apartó temporalmente, ahora es su propio partido quien lo repudia. Un signo de que otras consecuencias de más calado pueden estar a la vuelta de la esquina. Fue su decisión improvisada de volver a la presidencia de la Diputación, —de la que se apartó temporalmente hace escasos días— lo que ha terminado de desatar la tormenta. “Está solo y desautorizado”, ilustró  Lluis Sais, presidente de ERC en la diputación. “Debe ser Convergència i Unió quien tome las decisiones”, añadió. “Esperemos que lo haga en las próximas horas”, remachó.

Las reuniones entre diputados de CiU y altos cargos de Convergència y de Unió se multiplicaron a lo largo del día para buscar una salida a la crisis, según fuentes de la federación que no concretaron el contenido de las negociaciones.

Torramadé acusa a Unió de “defenestrarle políticamente”

Hasta ahora Jaume Torramadé se ha mantenido enrocado, aferrándose al puesto en la Diputación y a la alcaldía de Salt, que ha conseguido mantener casi indemne a pesar del escándalo que supone que una ex asesora le haya denunciado por acoso sexual que ha presentado contra él una ex asesora.

El comité ejecutivo de Unió explicó que “no considera adecuado” que el hasta ahora presidente vuelva a ocupar el cargo en la Diputación, solo la semana después de anunciar que daba “un paso al lado" temporal. Ningún “hecho objetivo" justifica la decisión “unilateral”, lamentó la formación en un comunicado en el que anunció la decisión de apartar “definitivamente” a Torramadé de la presidencia de la Intercomarcal de Girona.

Torramadé emitió un comunicado, avanzada la tarde, en el que acusó a los dirigentes de Unió de intentar “defenestrarlo políticamente” y dejó claro que acata la decisión pero no la comparte. La reacción es “desmesurada y desproporcionada”, según el alcalde de Salt. La denuncia por acoso sexual sigue su curso y ni siquiera han comenzado las declaraciones en sede judicial. Pero cada vez importa menos lo que ocurra con este procedimiento, como queda patente en el comunicado de UDC. Unió quiere “preservar y exigir el máximo respeto al principio de inocencia, y en base a esto, rechaza cualquier juicio previo, así como cualquier acusación mediática” que se haga. El partido “desvincula totalmente” sus decisiones de los hechos que han generado el escándalo, es decir, de la denuncia de Minerva Amador por los supuestos repetidos tocamientos que le realizó Torramadé en una cena de inicio de campaña, el pasado 8 de noviembre, y de la denuncia (previa) de este contra su ex asesora por intento de extorsión.

Torramadé anunció el martes en un movimiento sorprendente su intención de volver a ocupar la presidencia de la Diputación de Girona, solo cinco minutos antes de que comenzase el pleno en el que el organismo aprobó abrir una investigación interna sobre el escándalo y sin avisar previamente ni a los diputados de CiU ni al resto de grupos. Los diputados de su propio grupo se lo impidieron y la destitución del cargo de presidente de Unió ha convertido su retorno en algo no asumible por nadie. Torramadé intentó enmendar ese error y pidió disculpas ese mismo día, explicaba él mismo en el comunicado de este miércoles.

“Es necesario que se aclare si se ha hecho un uso impropio de los fondos de la Diputación”, declaró ayer la portavoz socialista, Pia Bosch. El PSC quiere saber si son ciertas las afirmaciones de que los enviados de Torramadé se plantearon pagar con dinero de la Diputación el silencio de la mujer. La comisión deberá investigar también el encargo que Torramadé hizo al abogado que le asesoraba, Rafael Entrena, de un informe con cargo a fondos de la institución —que no se ha retribuido— sobre “seguridad de las instalaciones deportivas”. Un informe que se encargó en medio de la crisis por el escándalo, según publicó el Diari de Girona.