Sordo opta a seguir dirigiendo CC OO y anuncia una “movilización permanente”

Unai Sordo (Bilbao, 1972) optará a la reelección como secretario general de CC OO Euskadi en el décimo congreso confederal que el sindicato celebrará los próximos 10 y 11 de enero en la capital vizcaína. Junto a otros dirigentes de su central, Sordo ha presentado hoy en Bilbao el cónclave, que se desarrollará bajo el lema Organizarse en la empresa y confluir en la sociedad, con la participación de 276 delegados, a los que se sumarán los miembros de su ejecutiva.

La central se quiere plantear como eje de actuación sustanciar la lucha contra la crisis en "una estrategia de movilización permanente".

El dirigente sindical, quien ha reconocido que la cita se celebra en un momento "clave" para el sindicalismo debido al "nuevo modelo de sociedad" que se plantea, ha calificado el de enero como un "congreso de renovación" ya que, a diferencia de otros anteriores, CC OO ha celebrado previamente los congresos de sus federaciones territoriales, el 90% de las cuales ha renovado su dirección.

En este proceso, se ha registrado un rejuvenecimiento de los responsables de las federaciones (se ha bajado de 56 años de media a 43) y un aumento de la presencia femenina (de una a tres mujeres al frente de dichas organizaciones).

CC OO Euskadi llega al cónclave con una "leve" disminución de afiliados, aunque con un incremento del porcentaje de afiliación sobre población ocupada al haber descendido el número de asalariados en el actual contexto de caída del empleo, ha asegurado Sordo.

A su entender, la actuación de CC OO ha sido la que ha supuesto "una mejora más importante" para los trabajadores en Euskadi a través de las medidas acordadas en el marco del diálogo social con empresarios y Gobierno vasco y la negociación colectiva.

Sordo, que ha recordado que la situación ha "abocado" al sindicato a convocar cuatro huelgas generales en Euskadi en cuatro años, ha explicado que CC OO tiene previsto sustanciar su lucha contra la crisis en una estrategia de "movilización permanente" en Euskadi. Tras puntualizar que ello no implica que el sindicado vaya a abandonar su capacidad para hacer propuestas, ha argumentado que "la baza que se deja al movimiento sindical es la movilización".

Ha evidenciado que la conflictividad social está aumentando como consecuencia de la reforma laboral aprobada por el Gobierno del PP y ha advertido de que la empresa que pretenda de manera unilateral no aplicar el convenio acogiéndose a la nueva legislación "tendrá enfrente" a CCOO.

También ha alertado de la posible conflictividad que pueda registrarse a partir de julio por el riesgo de desaparición de convenios colectivos sectoriales al concluir el límite de un año que la reforma laboral ha dado a la ultraactividad de los mismos —su aplicación una vez finalizada la vigencia del convenio hasta ser sustituidos por un nuevo acuerdo—.