Una exposición evoca en la plaza de Castilla la tragedia de la ciudad sepultada bajo 7 metros de ceniza tras una gigantesca erupción del Vesubio
La muerte sorprendió a un joven, cuyo cadáver dejó un hueco cubierto posteriormente con yeso, mientras intentaba huir.SAMUEL SÁNCHEZFíbulas y broches recuperados entre la ceniza de Pompeya.SAMUEL SÁNCHEZRetrato de Safo al fresco, procedente del Museo Arqueológico de Nápoles.SAMUEL SÁNCHEZNumerosos objetos de la vida cotidiana quedaron enterrados tras la erupción del volcán.SAMUEL SÁNCHEZUna efigie de Príapo evoca el erotismo de la sociedad pompeyana.SAMUEL SÁNCHEZBronces y mármoles procedentes de Pompeya ilustran la exposición.SAMUEL SÁNCHEZPiezas de cerámica doméstica pudieron conservarse enterizas bajo la ceniza volcánica.SAMUEL SÁNCHEZLos restos óseos conservados fueron hallados en el litoral hacia el que los pobladores de Pompeya huyeron.SAMUEL SÁNCHEZUn perro atado a su correa fue sorprendido por la muerte en un atribulado escorzo.SAMUEL SÁNCHEZAbundante estatuaria romana ilustra la exposición del Canal.SAMUEL SÁNCHEZ
