La primera iniciativa parlamentaria del PSE será un debate para crear empleo

Patxi López pretende proyectar en el Parlamento vasco su exigencia dentro del PSE-EE de un acercamiento a la calle mediante la renovación de ideas, que ayer, en el Comité Nacional, antepuso al de las personas, con la mirada puesta en el próximo congreso interno, anunciado para los días 9 y 10 de febrero. Como primer ejemplo, los socialistas abrirán sus iniciativas en la Cámara de Vitoria con una propuesta sobre la creación de empleo, que su portavoz, José Antonio Pastor, detallará hoy en una rueda de prensa.

López quiere que su partido se deje notar en el Parlamento, acometiendo una oposición constructiva sobre cuestiones que han quedado pendientes en la pasada legislatura. Así lo dijo en la mañana de ayer durante la reunión que mantuvo con el grupo parlamentario y por la tarde lo recordó al resto de los principales dirigentes del PSE-EE. Las cuestiones relativas a la propuesta de Ley Municipal, a la reforma y fraude fiscal, entre otras, formarán la agenda de las iniciativas parlamentarias con el propósito, según admitió el lehendakari en funciones, de superar los márgenes que le acota su condición de segunda fuerza de la oposición.

Pero el secretario general de los socialistas vascos entiende que, en paralelo, su partido debe concretar una nueva oferta política y, después, pensar en las personas que lo articularán ante la sociedad. López dedicó muchos minutos a trasladar la preocupación que le asiste sobre la fórmula de Estado a partir de la convulsión vivida en Cataluña y de las aspiraciones de PNV y EH Bildu en Euskadi.

Apuesta por el federalismo y por defender la reforma de la LTH

En su discurso, el dirigente socialista eludió cualquier interpretación de los resultados del PSC y prefirió ahondar en su apuesta por el federalismo como fórmula idónea para la estructura de España. “Los movimientos nacionalistas en el mundo desarrollado están agotando su recorrido y cada vez tienen menos sentido y menos cabida”, acusó López con un tono de seriedad, similar al empleado para instar al resto de dirigentes socialistas a que debatan sin complejos la necesidad de reformar la Ley de Territorios Históricos (LTH) y así adecuar la estructura institucional vas a la nueva realidad.

Fue un Comité Nacional sin intervenciones. Apenas cabe citar como única excepción el turno de palabra ya habitual del veterano militante José Ródenas, que se explayó sin carga alguna de profundidad aunque no se olvidó de elogiar la gestión de López y de referirse, preocupado, a la división del partido en Álava a la hora de apelar a la unidad interna.

Precisamente López volvió a intervenir ante el Comité, que reunió en Bilbao a acerca de 200 militantes, para quejarse de que alguno de los miembros de la dirección socialista allí presentes había filtrado a la web de un periódico local las fechas de celebración del próximo Congreso durante la propia reunión.

El congreso será los días 9 y 10 de febrero. No se podrá acumular cargos

Fue la única nota altisonante en un discurso muy centrado en la exigencia de “buscar instrumentos para hacer el partido más abierto y cercano, y que en última instancia se aborde la renovación de cargos”. López fue muy explícito al reclamar que nadie equivoque “las prioridades en este proceso”. Como única pista a seguir, abogó por “una asignación de responsabilidades que no sea acumulativa”.

En ninguna de sus dos intervenciones se refirió a las dos polémicas políticas mantenidas con el PNV en torno al traspaso de poderes y a la paga de la extra de Navidad a los funcionarios de la Administración vasca. Posiblemente no quiso avivar la tensión, consciente de que aún no se ha encontrado el momento para acordar una fecha en la que comiencen, eso sí en secreto esta vez, las primeras reuniones técnicas.