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Cataluña solicita el rescate y Buch se siente más aliviado

El consejero avanza que “va a haber una mejora notable” en el déficit del primer semestre

Máximo Buch, a la izquierda, con el presidente Alberto Fabra, en la Cámara de Comercio de Valencia.
Máximo Buch, a la izquierda, con el presidente Alberto Fabra, en la Cámara de Comercio de Valencia. MANUEL BRUQUE (EFE)

Las peticiones de rescate de Cataluña y Murcia vinieron a aliviar la aflicción del consejero de Economía, Máximo Buch. La Comunidad Valenciana no será la única comunidad autónoma que tendrá que recurrir al Fondo de Liquidez Autonómico (FLA) para evitar la quiebra de sus finanzas. Antes de que se supiera que Cataluña iba a recurrir al Fondo, Buch ya vaticinaba que otras autonomías iban a necesitar ser rescatadas.

El consejero, que hizo estas declaraciones en la Cámara de Comercio de Valencia durante la presentación de un plan de estímulo para emprendedores, cifró en 400 millones de euros el impacto económico derivado de reducir el déficit al 0,7% como exige la adhesión al FLA.

La Comunidad Valenciana fue la primera en solicitar la ayuda al Fondo de Liquidez, lo que suponía un rescate en toda regla. Sin embargo, los responsables políticos del Consell se empeñaron en negar la evidencia y en rechazar cualquier vinculación con el alza de la prima de riesgo y el hundimiento de la Bolsa. Pero los hechos son que tras solicitar su adhesión al Fondo, la prima de riesgo subió de manera espectacular y terminó cerrando en los 610 puntos.

Pese a ello, Buch siguió insistiendo en que no existía relación alguna entre ambos hechos y que el incremento del diferencial con el bono alemán tenía que ver “más con la especulación que con las realidades de la economía española y de los esfuerzos que se están haciendo”, en su opinión, todos “en el buen sentido”.

Preguntado este martes por la reacción negativa de los mercados tras el anuncio del rescate valenciano, Buch no opina que fuese un castigo. “Yo creo que ocurrió lo contrario. Standard & Poor’s sacó inmediatamente una nota felicitando a la comunidad de Valencia por haber tomado la iniciativa”, apostilló. El consejero hacía así referencia a la decisión de la agencia de no reducir aun más la calificación, sino mantenerla en BB con perspectiva negativa, el bono basura.

“Ya habíamos tomado en consideración esta petición dentro de nuestro escenario base”, explica Standard & Poor’s, que considera que su actual calificación “ya incorpora la expectativa de que Valencia accedería en 2012 a una línea de liquidez del Gobierno central con el fin de cumplir con las obligaciones del servicio de su deuda”. En este sentido, la agencia apunta que si esta línea de crédito funciona sin problemas esto debería permitir a la región hacer frente a cualquier problema de liquidez en la segunda mitad del año.

El consejero de Economía avanzó que “va a haber una mejora notable” en el déficit del primer semestre del año y aseguró que las medidas de ajuste que ha aprobado la Generalitat en los últimos meses están comenzando a dar sus frutos.

La Generalitat tiene una necesidad de liquidez de 3.500 millones de euros antes de acabar el año, sin embargo, el consejero precisa que muchos de los ajustes realizados en 2012 no van a tener “efecto relevante hasta el año que viene”, como es el caso de la reestructuración del fondo púbico empresarial que producirá “ahorros que solo tendrán impacto en el último trimestre” de 2012. Máximo Buch no prevé que sean necesarios más ajustes para alcanzar nuevo objetivo de déficit para 2013.

La adhesión al Fondo de Liquidez Autonómico supone reducir el déficit del 1,1% previsto al 0,7%, lo que supondrá un impacto económico de 400 millones de euros más. Pese a esto, Buch afirma que no se realizarán nuevos ajustes.

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