Pemex y Xunta escenifican su pacto para negociar inversiones navales

Primero se anunció el acuerdo “histórico”, entre la petrolera Pemex y la Xunta, que iba a ayudar a los astilleros gallegos a superar la crisis. Después llegaron las dudas sobre si no sería una secuela de Bienvenido Mister Marshall. Ahora parece que por fin toca hablar de “lo definitivo”, de “planos, modelos y precios”, aunque el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ya le ponga cifras a algunos pedidos que podría hacer la petrolera en Galicia (300 millones de dólares por dos quimiqueros).

Ayer se celebró la puesta de largo de la visita de una delegación de empresarios mexicanos a Vigo encabezados por el consejero delegado de Pemex internacional, José Manuel Carrera, para “honrar el compromiso” sellado entre la compañía y la Xunta de contratar aquí siete remolcadores y hacer otros siete en México con auxiliares gallegas. Le acompañaban directivos de seis astilleros de su país.

En su breve intervención quiso dejar dos cosas claras: que su intención es concretar los pedidos cuanto antes y que busca la cooperación con los astilleros españoles para “operaciones de transferencia de tecnología”. De hecho, las jornadas técnicas que ayer se celebraron en un lujoso hotel de la ciudad estaban centradas en los beneficios del traspaso de la capacidad productiva a otros países. Es la cuarta visita que la delegación mexicana realiza a Galicia, pero nunca antes había levantado tanta expectación.

El acuerdo con la Xunta, sin embargo, depende de que lleguen a buen puerto los contactos con los constructores. Por fin se habló de una fecha para los primeros anuncios: septiembre de este año. “La industria de esta comunidad se compromete y cumple”, garantizó Feijóo, convencido de que pronto habrá trabajo en las gradas de la ría. Entre el público estaban los responsables de Barreras, José García Costas; Metalships, —Manuel Rodríguez— y el director de Vulcano, José Luis Méndez. El futuro que Feijóo trazó para el sector sale de las sombras e inicia este año la “senda de la recuperación, gracias al trabajo y la persistencia del sector”.

El gerente del cluster del naval, Tomás Casquero, apuntó sobre los astilleros que podrían acoger los encargos que cada uno tiene unas circunstancias y una experiencia definida, aunque “cualquiera”, podría abordar el trabajo. “Habrá empresas con más interés en un determinado tipo de buques y otros en otro. En todo caso, es una oportunidad para todos”.