EH Bildu encabeza su lista con una escritora ‘abertzale’

Profesora, escritora y, sobre todo, abertzale. Es el perfil de quien encabezará la apuesta de EH Bildu para las próximas elecciones autonómicas vascas. Tras varias semanas de reflexión y sondeos internos, Laura Mintegi ha sido finalmente la elegida como candidata a lehendakari por la coalición soberanista. A sus 56 años, será la encargada de guiar el mayor reto institucional de la antigua Batasuna tras su regreso a la legalidad. Con su presentación pública, ayer en un céntrico hotel de Bilbao, se completan los nombres de quienes pujarán por liderar el próximo Gobierno vasco. Un cartel que integran también el socialista y actual lehendakari, Patxi López, el peneuvista Iñigo Urkullu y el popular Antonio Basagoiti.

Navarra de nacimiento, aunque vizcaína de adopción, Mintegi se presentó ayer como el rostro amable de la izquierda abertzale para atraer los votos con los que poder competir con el PNV por la hegemonía nacionalista. Su primer discurso fue más de principios que de reproches, aunque tampoco renunció a la crítica. Citó los encarcelamientos “por delitos de opinión” como reflejo de una “pseudodemocracia” y dibujó a EH Bildu como la alternativa para “cambiar el rumbo” en Euskadi. También reprobó a quienes “van a Madrid a rendir pleitesía”, en alusión a Urkullu y su reciente reunión con el presidente Rajoy. “En estos momentos de crisis, plantear la independencia no es solo el sano ejercicio de un derecho reconocido a nivel internacional, sino una cuestión de supervivencia ante el naufragio español”, reivindicó.

El derecho a decidir y la paz “en sentido amplio” guiarán el proyecto soberanista

Arropada por dirigentes de Aralar, EA, Alternatiba y la antigua Batasuna, Mintegi fijó en la autodeterminación uno de los ejes programáticos. El otro lo situó en torno a la paz, aunque entendida “en sentido amplio”, más allá del fin del terrorismo de ETA. Así, defendió la normalización de la vida política y el saneamiento de una democracia que juzgó “corrompida por la exclusión”, en referencia a la Ley de Partidos. “Habrá que poner las bases para que cualquier opción política pueda ser defendida y llevada a la práctica si cuenta con el respaldo ciudadano suficiente”, manifestó. Además, abogó por una sociedad fundamentada en la justicia social, cuyo punto de mira se sitúe “en las personas y no en los capitales”.

Reflejo quizá de la importancia histórica que EH Bildu da a las próximas autonómicas, cuyo adelanto parece cada vez menos probable, la puesta de largo se cuidó con mimo. Para empezar, con el propio escenario, el hotel Carlton, que fue la sede del primer Gobierno vasco durante la Guerra Civil. Un guiño al pasado con el que la coalición quiso evidenciar, en palabras de la ayer protagonista, que “un ciclo acaba y vivimos el comienzo de otro nuevo”. Un futuro al que miró desde la perspectiva de la pluralidad y la necesidad de “acuerdos entre diferentes”. “Nos han querido hacer creer que la multiplicidad significaba variedad, cuando en realidad era todo más de lo mismo”, consideró Mintegi, en un intento de incidir en el rasgo diferencial de la marca abertzale. “Ofrecemos a la sociedad vasca un proyecto de país, con vocación soberanista y valores de izquierda”, resumió.

La designación de Mintegi no tardó en motivar las primeras reacciones. La portavoz del Gobierno vasco, Idoia Mendia, aseguró que el proyecto político de la izquierda abertzale es lo relevante, más allá de quién lo encabece. En cambio, el líder del PP en Euskadi, Antonio Basagoiti, acusó a la candidata de EH Bildu de plantear el chantaje de que “la paz llegará con la independencia”. Además, le reprochó la ausencia de una condena del terrorismo en su discurso de presentación.