Desarticulada en Lleida una banda que traficaba con ucranianos

Agentes del Cuerpo Nacional de Policía de Lleida han desarticulado en las poblaciones de Les (Val d'Aran) y El Pont de Suert (Alta Ribagorça) a un grupo organizado que se dedicaba a falsificar documentos para facilitar la entrada ilegal en España de ciudadanos de Ucrania, a los que después explotaban laboralmente para cobrar la deuda contraída con la banda haciéndoles trabajar en la hostelería con jornadas de hasta 12 horas por 300 y 400 euros mensuales. En la operación han sido detenidas siete personas, seis ucranianos y un empresario hostelero español.

Los detenidos están acusados de varios delitos de falsedad documental, de tráfico de seres humanos, contra los derechos de los trabajadores y contra la Administración de justicia.

De todos ellos solo un ucraniano, I. T., de 36 años, considerado el jefe de la organización, ha ingresado en prisión por orden del Juzgado de Vielha, encargado de dirigir la investigación policial que se inició el pasado mes de febrero cuando un ucraniano se personó en la comisaría de Les, en la frontera con Francia, para tramitar su documentación como ciudadano comunitario con pasaporte lituano. Paralelamente, se detectó en la zona del valle de Aran y en la comarca de la Alta Ribagorça la presencia de un centenar de personas de esa nacionalidad, empadronadas en Les y El Pont de Suert, donde posiblemente esperaban la llegada de la documentación falsa.

Los responsables de la operación policial consideran que se trata de un caso claro de esclavismo o de tráfico de seres humanos, similar a la trata de blancas pero con hombres, a los que una vez habían llegado España se les explotaba laboralmente para cobrar el dinero anticipado por la banda para pagar el viaje y la documentación. Este es un delito más grave que si fuera un mero tráfico ilícito de inmigrantes mediante precio.

En este caso, la policía española ha contado con la colaboración de la policía del Reino Unido, país donde se falsificaban los documentos y se confeccionaban los pasaportes falsos lituanos y checos.

El ucraniano I. T. era el encargado de contactar en su país con compatriotas que quisieran trabajar en España y de proporcionarles documentación falsa con la que se hacían pasar por ciudadanos lituanos y checos. Con esa documentación se personaban en las dependencias de la Unidad de Extranjería y Documentación de Les y conseguían certificados de ciudadanía comunitaria. Este era el modo más fácil de regularizar su situación sin ser detectada la falsedad.

Un empresario de El Pont de Suert los empleaba para realizar diversas labores en hostelería y deportes de aventura de esa zona del Pirineo leridano. La policía y la Inspección de Trabajo pudieron comprobar que dicho empresario tenía empleados a trabajadores españoles sin contrato ni Seguridad Social.

La policía ha explicado la mañana de este lunes que los ucranianos eran explotados y obligados a trabajar en condiciones indignas, con salarios de entre 300 y 400 euros mensuales y con jornadas laborales de más de 12 horas. Alguno de estos trabajadores había guiado como monitor a grupos de turistas en descensos de ríos en botes neumáticos, actividad conocida como rafting, o había realizado el mantenimiento de motos de nieve sin tener formación para ello.

La policía efectuó dos registros domiciliarios, en los que intervino abundante documentación falsa y material informático que está siendo examinado por los investigadores. La intervención policial en la fase inicial del delito ha evitado la entrada ilegal en España por esta vía de decenas de ucranianos.

El pasado mes de febrero se desmanteló en Lleida otra red importante dedicada al tráfico ilegal de inmigrantes asiáticos, la mayoría de nacionalidad paquistaní, que entraban por el valle de Aran y San Sebastián desde el Reino Unido y Francia, en un viaje en condiciones penosas, ocultos en contenedores y cajas de camión.