Sanidade planea privatizar las cocinas de los hospitales

La conselleira de Sanidade, Rocío Mosquera, negó ayer tajantemente que la Xunta vaya a cobrar las comidas a los enfermos ingresados en los hospitales. En una visita a varias unidades del nuevo Hospital Universitario Lucus Augusti de Lugo, Mosquera negó que se pueda deducir esta medida de las declaraciones realizadas hace unos días por el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, que en una entrevista en ABC, hablando de los recortes que él cree que se deben realizar en el sistema público de salud, destacaba que “darle la comida o hacer la cama” a un paciente “no es sanidad”.

Mosquera esgrimió que “se está confundiendo lo que es la gestión con lo que es la gratuidad de la prestación”. La conselleira sí admite que su departamento estudia la privatización de más servicios gestionados ahora directamente por la Administración en los hospitales. “Lo que sí se está valorando en otros hospitales son los servicios a externalizar”, afirmó Mosquera, quien citó entre las medidas en estudio la privatización de los servicios de limpieza en los hospitales en los que aún son públicos. “En algunos casos se piensa en externalizar otros servicios, entre otros la cocina”, afirmó para luego matizar. “En ningún caso eso significa que se vaya a cobrar por la comida”.

Mosquera insistió en que “se pueden buscar otras fórmulas de gestión y la externalización de determinados servicios que no son puramente asistenciales, para poder garantizar que la asistencia sanitaria va a ser gestionada por la pública”.

Centro de salud pública

 La conselleira de Sanidade aprovechó su visita al hospital lucense para anunciar que “en breve” se licitará la reforma del laboratorio de salud pública de referencia para Galicia. El proyecto, en el que se invertirán casi dos millones de euros, iba a suponer el traslado del centro al viejo hospital materno de la ciudad pero, apelando al ahorro, finalmente se ejecutará en la delegación de Sanidade, actual sede del laboratorio.

“La decisión es en parte económica y en parte porque el laboratorio ahora mismo está bien ubicado, está bien dotado y es simplemente una ampliación. La obra en el Materno era una obra más compleja, más complicada, había que arreglar los tejados, con lo cual iba a llevar mucho más tiempo”, explica Mosquera. “En este momento tenemos que mirar cómo se gestiona cada euro disponible”.