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Los alumnos de FP estrechan su relación con las empresas

El programa Hezibi permite alternar trabajo y formación

Celaá (derecha) y Zabaleta, en una muestra dedicada a la Formación Profesional en Irún.
Celaá (derecha) y Zabaleta, en una muestra dedicada a la Formación Profesional en Irún.JESÚS URIARTE

El programa de Formación Profesional (FP) en alternancia, que combina formación y trabajo a partes iguales dirigido a los jóvenes vascos menores de 30 años sin cualificación, fue presentado ayer en sociedad. Las consejeras de Educación, Isabel Celaá, y de Empleo, Gemma Zabaleta, presentaron ayer en en el recinto ferial de Ficoba en Irún, el nuevo modelo dentro de las iniciativas con las que el Ejecutivo busca paliar el desempleo, que completa el actual sistema integrado de FP en Euskadi. El objetivo; atender las demandas formativas tanto de las empresas como de los trabajadores en activo y desempleados.

El programa Hezibi, que aún está por cerrar con las empresas que tomarán parte en él, según Confebask, arrancará en septiembre con el inicio del curso 2012-2013 y estará destinado al menos a 1.000 estudiantes. Mientras realicen los estudios, los alumnos tendrán un contrato laboral firmado con la empresa donde pasarán la mitad del tiempo lectivo y recibirán un pequeño sueldo.

El plan se dirige a 1.000 jóvenes de menos de 30 años y sin cualificación

El nuevo sistema, financiado por el Gobierno, cuenta con un presupuesto de ocho millones de euros. Lanbide aportará 2.000 euros por cada alumno y curso escolar para que la empresa formalice los contratos.

El pionero sistema se encuentra en el punto de mira de otras comunidades autónomas y del propio Ministerio de Educación que está estudiando cómo implantarlo siguiendo el modelo alemán de FP que integra teoría y práctica en la misma formación. “A diferencia de las prácticas ordinarias en las empresas, en Hezibi el protagonismo fundamental es para la formación porque, además de un contrato de trabajo, hablamos de formación en dos entornos alternando la formación que se realiza en dos ámbitos; en el centro de formación y en centro de trabajo” explicó Celaá.

El sistema de alternancia permitirá que las empresas estrechen su relación con el mundo de la formación y puedan comunicar sus necesidades de competencias y demandas profesionales directamente y de forma permanente. “Pero no es una formación dual. El eje del proceso educativo pivota en torno a los centros educativos y no entorno a las empresas aunque estas intervengan en la configuración del programa formativo”, recalcó Celaá

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Zabaleta recordó que el proyecto es fruto del trabajo conjunto de la mesa de diálogo social, el Consejo Vasco de FP y el propio Consejo de Administración de Lanbide.

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