Enfrentamiento vecinal por el envenenamiento de un animal en Herbón

La manifestación de ayer estaba convocada oficialmente en más de 30 ciudades de toda España, entre ellas Vigo, Santiago, Pontevedra, Ourense y A Coruña, pero en Padrón también tuvo lugar, y allí tenía una significación especial. Todas eran marchas de respaldo a la iniciativa popular que reclama un endurecimiento de las leyes contra el maltrato animal, pero esta tenía una víctima reciente por la que clamar justicia. Se trataba de Alma, la perra pastor del prior del monasterio de Herbón, educada para usos terapéuticos con personas con síndrome de Down, que murió el día 4 después de comer chorizo envenenado con estricnita. La protesta, que reunió a un ciento de personas y 60 animales de compañía, fue convocada por la asociación So lles Falta Falar, que trabaja por el respeto a la fauna doméstica, su integración en el entorno urbano y su participación en programas de ayuda a ancianos y discapacitados.

La muerte de Alma se debió, por lo que se explicó en la manifestación, a un ajuste de cuentas entre dos bandos vecinales enfrentados en Herbón. Hasta cuatro colectivos, entre ellos la Asociación Galega de Amigos do Camiño de Santiago, han pedido que se declare Bien de Interés Cultural todo el conjunto del cenobio local, a cuyos monjes se debe la llegada de los pimientos que han dado fama a esta parroquia padronesa. La medida protegería también el entorno, aunque no afectaría a los invernaderos. No obstante, según se defendió en la marcha, algunos vecinos creen que perjudicaría sus negocios.