El juez envía a prisión a la mujer detenida por el crimen de Mallabia

El juez de Durango que instruye el caso decretó ayer por la tarde el ingreso en prisión incondicional de la mujer arrestada el pasado martes en Barakaldo por su supuesta implicación en el asesinato de Jaime Olañeta Urdaneta, jubilado de 68 años, en la localidad vizcaína de Mallabia el pasado 9 de marzo.

La decisión judicial llegó tras localizar la Ertzaintza horas antes, en la dársena que la ría de Bilbao forma en Barakaldo, el cuchillo que pudo hacer utilizado la detenida para matar a Olañeta. Según fuentes de la investigación, la mujer habría informado a la policía autonómica del lugar aproximado en el que se deshizo del arma.

Los buzos de la Ertzaintza localizaron a mediodía en el área indicada un cuchillo de cocina de grandes dimensiones. Poco después, el juez que instruye el caso decretó el ingreso en la cárcel de Basauri de la mujer, de 46 años.

Olañeta apareció muerto el pasado día 9 de marzo al lado de su coche, a pocos metros de la casa del barrio de Osma en la que vivía solo. Se trata de una zona rural apartada de la carretera general que une Mallabia con Berriz. El cuerpo del varón presentaba numerosas heridas de arma blanca en el cuello y en el pecho, lo que llevó a los investigadores a sospechar que el móvil del crimen podría haber sido personal.

Fuentes policiales señalaron tras la detencíón de la acusada que ésta conocía a la víctima y que a ambos les podía unir “cierto vínculo afectivo”. Ayer se especulaba con la posibilidad de que la mujer hubiera mantenido una relación sentimental con un empleado del jubilado. La ruptura de esta relación podría haber provocado la reacción homicida.

Numerosas huellas

Olañeta era un hombre muy conocido en la zona en la que residía, al igual que sus hermanos. Su muerte causó una gran conmoción entre los vecinos. Los investigadores hallaron tanto en el inmueble como en el vehículo de la víctima, un Peugeot 207 de color blanco, numerosas huellas que supuestamente implicaban a la detenida.

Tras el arresto de la mujer el martes pasado, la Ertzaintza registró su domicilio de la calle Gernikako Arbola de Barakaldo. Tres agentes de la Policía Científica tomaron restos de huellas y se llevaron diferentes objetos. Las investigaciones se encuentran todavía bajo secreto de sumario.