Menos gasto en carreteras y en lucha contra incendios

» Menos gasto en conservación de carreteras. Es la única actuación en la que la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestructuras, que ha perdido el 40% de su presupuesto desde 2009, ha reconocido sin ambages el tijeretazo. La medida solo afectó a las carreteras de titularidad municipal.

» Aplazamiento de la Autovía de O Morrazo. Oficialmente no es un recorte, ya que se iba a sufragar mediante un canon por uso y no repercutiría en los Presupuestos hasta que estuviera concluida. La Xunta dejó desierto el concurso, por lo que su ejecución queda aplazada.

» 620 millones menos para el Plan MOVE. El plan de movilidad y ordenación viaria se tuvo que “ajustar” a los presupuestos, con un recorte de 620,9 millones en el período 2009-2015. Pese a todo, el conselleiro Agustín Hernández aseguró la ejecución de las 12 autovías previstas en ese programa.

» Desplome en infraestructura y equipamiento rural. Medio Rural redujo en 47 millones su inversión, que se resiente sobre todo en nueva obra (de 42 a 5,5 millones).

» Menos recursos contra el fuego. Las acciones preventivas y la construcción de infraestructuras para la lucha contra el fuego perdieron más de 16 millones. Este verano, habrá cuatro millones menos para las brigadas de refuerzo.

El presupuesto de Medio Ambiente ha caído un 40% en esta legislatura

» La mitad para conservación. El dinero para la puesta en valor de la biodiversidad y la conservación se queda en la mitad: de 14 millones en 2010 a los siete reservados este año.

» Fijación de población en el medio rural. Pese a que la Xunta repite que es un objetivo, pierde tres millones. De 42 se queda en 39.

» Reducciones en modernización del tejido productivo. Las empresas del rural cuentan con un 27% menos de fondos. Para diversificación bajan de 30 a 24 millones, mientras que las transferencias para la mejora de la calidad agroalimentaria pierden un 65,3%.

La prevención de fuegos forestales pierde 10 millones en cuatro años

» Menos inversión en bienestar animal. De 23 millones se pasa a 15 millones.

» Sin seguro colectivo en el mar. La Xunta renunció a renovar el seguro colectivo que desde hace 20 años cubría a los trabajadores por fallecimiento o invalidez, y que los familiares cobraban automáticamente tras un naufragio. Ahorraron 1,2 millones.

» El fin de la prestación para mariscadores. La cobraban las mayores de 65 años sin derecho a pensión contributiva.

» Menos para competitividad. La mejora de la calidad de la producción pesquera y la acuicultura perdió casi cuatro millones: de 6,1 a 2,8.

» Protección del medio natural marino. En dos años se redujeron los fondos un 17,8%.