_
_
_
_
_

UGT denuncia un "boicot" de Renfe en la marcha contra la reforma laboral

El sindicato acusa a Cercanías de obviar el dispositivo especial pese a la manifestación prevista En algunas estaciones los trenes "no abrían las puertas por ir abarrotados" "No querían que la gente llegara a la protesta", señala el responsable de UGT La operadora de ferrocarril guarda silencio

Pilar Álvarez

Un tumulto de viajeros en la estación de Cercanías de Puerta de Atocha. Trenes que pasaron sin dejar bajar a los viajeros por otros andenes como los de las paradas Villaverde Bajo, el Pozo o Santa Eugenia. La movilización contra la nueva reforma laboral celebrada en distintas ciudades de España el domingo tuvo consecuencias más que molestas en la red de Cercanías de la capital, según señala el  UGT.

El sindicato ha denunciado en un juzgado de instrucción de Madrid a la operadora Renfe, a "personas desconocidas" y a "cualquier otra persona física o jurídica" relacionado con la avalancha que se vivió en la estación principal de Cercanías de la capital. Una portavoz de la operadora ferroviaria declinó dar información sobre este asunto.

"Ha sido un boicot por parte de Renfe para que la gente no pudiera asistir a la manifestación", señala Miguel Ángel Escolano, secretario del sector regional ferroviaro de UGT. Escolano asegura que ni se comunicó a los trabajadores ni se puso en marcha un dispositivo especial con refuerzo de trenes y medidas alternativas (como la apertura de torniquetes para evitar la formación de embudos cuando los viajeros tienen que pasar, uno por uno, sus billetes por el control).

El portavoz sindical recuerda otros casos en los que sí se toman medidas alternativas, como los partidos del Real Madrid en el estadio del Santiago Beranabéu (con unos 70.000 espectadores de media) o la Jornada Mundial de la Juventud, que el pasado agosto reunió a cientos de miles de peregrinos en la capital, con ceremonias multitudinarias previstas en la Plaza de Cibeles que contaron con un plan especial de refuerzo del transporte público. La manifestación del domingo convocó a más de "medio millón de personas", según estimaciones de los organizadores. Los cálculos de EL PAÍS reducen esa cifra a 110.000 asistentes. 

UGT ha denunciado ante un Juzgado de Instrucción de Madrid a la operadora ferroviaria por "lesiones y delitos contra la seguridad de los trabajadores". En el escrito señala que dos operadores comerciales de Puerta de Atocha fueron agredidos "por un tumulto de viajeros con motivo de una aglomeración que no pudo salir de forma fluida, que acabó comportándose violentamente y lesionando" a los trabajadores. Escolano precisa que se trata de agresiones "leves".

Según la denuncia, Renfe no previó la afluencia de la marcha ni adoptó medidas para hacer más fluido el tráfico de viajeros. Alude a "hacinamiento en los trenes" y "la insuficiencia de los tornos de salida para evacuar a los viajeros". Según el sindicato, la "falta de previsión" de Renfe provocó que hubiera estaciones en las que los trenes pararan pero no pudieran abrir las puertas "por ir abarrotados". El servicio ferroviario se reduce a la mitad durante los fines de semana, según estimaciones de UGT. 

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Pilar Álvarez
Es jefa de Última Hora de EL PAÍS. Ha sido la primera corresponsal de género del periódico. Está especializada en temas sociales y ha desarrollado la mayor parte de su carrera en este diario. Antes trabajó en Efe, Cadena Ser, Onda Cero y el diario La Opinión. Licenciada en Periodismo por la Universidad de Sevilla y Máster de periodismo de EL PAÍS.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_