Los clientes de la CAM sacaron 3.407 millones ante las dudas sobre la fusión

Los clientes de la CAM dudaron desde el principio del éxito de una hipotética fusión fría con Cajastur, Caja Cantabria y Caja Extremadura. Tras meses en los que se evidenció la debilidad de la caja de ahorros alicantina, que vivió un auténtico via crucis por encontrar un socio, a finales de septiembre la Asamblea de la entidad ratificó la fusión y al mes siguiente la CAM comenzó a perder depósitos, según recoge en el expediente disciplinario el Banco de España. Una retirada que se agudizó desde principios de 2011. El supervisor detalla en su informe que la caja de ahorros perdió entre el 1 de enero del año pasado y el 22 de julio, fecha en la que se interviene la CAM oficialmente, un total de 3.407 millones en depósitos.

De ese total, puntualiza el documento, 2.503 millones de euros se sacaron de la entidad a partir del 30 de marzo, fecha de la ruptura del acuerdo de fusión. Dicho de otra manera, durante el tiempo en el que teóricamente se avanzaba en concretar el acuerdo, los clientes de la Caja Mediterráneo sacaron 900 millones de euros en depósitos en señal de desconfianza. El expediente señala que entre el total de fondos retirados hubo una “significativa proporción de pérdida de los correspondientes a particulares” y también puntualiza que 2.000 millones fueron vencimientos mayoristas.

Esta fuerte retirada de fondos obligó a la CAM a buscar, entre abril y mayo, 4.000 millones mediante la emisión de cédulas hipotecarias. Esta continua sangría fue, precisamente, una de las causas que llevó al Banco de España a sustituir a los administradores de la CAM y a facilitarle una línea de liquidez por valor de 3.000 millones de euros para hacer frente a sus vencimientos más próximos.

Entre los fondos retirados hubo una “significativa proporción" de pérdida de los de clientes particulares

Por otro lado, el expediente del Banco de España hace hincapié en la arriesgada y perjudicial política que la CAM tenía en el sector inmobiliario como otra de las causas que deterioraron sus activos hasta límites insostenibles, dado la fuerte exposición de la caja a este sector. La entidad, a través de la sociedad Tenedora de Inversiones y Participaciones SL, participaba en 65 sociedades, que promovían otros tantos proyectos inmobiliario, a fecha de junio de 2011.

El informe destaca que el resultado de esta participación para la entidad fue incurrir en unas pérdidas de 1.011 millones “tanto por las aportaciones de capital realizadas a las sociedades como por las financiaciones otorgadas a los proyectos y los inmuebles adquiridos a sociedades de los grupos con los que la CAM mantenía vinculaciones societarias”. Estas inversiones provocaron en la CAM las mencionadas pérdidas que suponen un tercio de los fondos aportados (2.999 millones). Los motivos que llevaron a estar pérdidas fueron financiaciones de suelo por encima de su precio de adquisición o financiar proyectos especulativos de dudosa viabilidad.