El PNV repondrá las sanciones a los comercios que no atiendan en euskera

El Parlamento suprimió ayer las sanciones a empresas, comercios o establecimientos de más de 15 trabajadores y superficies de más de 400 metros cuadrados que no atiendan en euskera a su clientela. Lo hizo con el voto en contra de los grupos nacionalistas, que consideran esta modificación del Estatuto de las Personas Consumidoras y Usuarias un ataque y una vulneración de los derechos de los euskaldunes, y del de Ezker Anitza.

Hasta tal punto se enconó la cuestión que la portavoz del PNV en el debate, Garbiñe Mendizabal, se adelantó a advertir que el Gobierno que salga de las próximas elecciones autonómicas hará la contrarreforma de la normativa y repondrá las sanciones, dando por hecho así de entrada que el siguiente Ejecutivo será de su partido.

La modificación legal realizada ayer por la Cámara mantiene las obligaciones contenidas en la norma modificada, y que atañen a sectores de interés general, como el transporte, las comunicaciones, la energía y el sector de bienes y servicios, que reciben subvenciones por fomentar el euskera.

El portavoz socialista en el debate, Vicente Reyes, sostuvo, en su defensa de la decisión del Gobierno, que la eliminación de las sanciones supone, contra la opinión de sus detractores, un beneficio para la lengua. No hay nada que pueda provocar más rechazo hacia el euskera que la imposición de castigos, argumentó.

De su lado, el parlamentario del PP Iñaki Oyarzábal defendió la necesidad de proteger el euskera “sin imposiciones ni intromisiones en el ámbito privado”.