Spanair dejó de pagar en abril el seguro de sus tripulantes de cabina

Spanair dejó de pagar en abril el seguro que contrató con Mapfre que cubría a sus 967 tripulantes de cabina con hasta 150.000 euros por si se quedaban sin poder ejercer su trabajo a causa de alguna enfermedad. Los representantes de los trabajadores se enteraron de ello cuando les llamó un compañero de Palma de Mallorca, Luca Abbamonte, que padece cáncer, y les avisó de que le habían comunicado que no se hacían cargo de su caso. A pesar de ello, la compañía siguió descontando de la nómina de sus empleados la parte correspondiente a este seguro, que pagaban a medias.

Los tripulantes de cabina de Spanair se enteraron ayer de que ya no estaban cubiertos por esa póliza, que cubre, por ejemplo, problemas cardiacos, neurológicos y crónicos, como pérdida de visión que impida volar de forma continuada. La noticia de la falta de pago del seguro llegó a Barcelona con los tripulantes de cabina que se desplazaron desde Palma de Mallorca para participar en la protesta que se celebró el miércoles ante la sede de la empresa, en L’Hospitalet.

Marta Fernández, una trabajadora, explicó que se enteraron de que Spanair no pagaba el seguro porque Mapfre llamó a un compañero enfermo de cáncer para comunicarle que dejaban de hacerse cargo de su caso. “Es increíble porque el seguro lo pagamos cada mes a medias, 24 euros los TCP y 24 euros la empresa, y nosotros hemos pagado con regularidad”, lamentó.

La correduría Aon Risk envió al tripulante de cabina enfermo una carta en la que le anunciaba que Mapfre Vida había anulado la póliza del colectivo con efecto desde el 15 de abril de 2011, por “ impago de las primas por parte de Spanair”. “Esta anulación equivale a la suspensión en el pago de todos los siniestros que tenemos abiertos, por lo tanto ya no podemos ordenar más transferencias”, añade la carta.

El representante del sindicato de auxiliares de vuelo Stavla en el comité de Spanair, Gabriel Opdal, calificó de “muy grave” la situación. “Nos han robado”, afirmó, y criticó que tampoco la aseguradora se haya puesto en contacto con ellos, pese a los impagos. “Hemos estado pagando sin estar cubiertos”, concluyó. Además de la pérdida de licencia, el seguro que los tripulantes tenían contratado cubría el fallecimiento por accidente o cualquier otra causa con 100.000 euros, y con 800 euros al mes las bajas médicas de más de seis meses.

A preguntas sobre el caso, Mapfre indicó que no puede facilitar información sobre sus afiliados y un portavoz de Spanair respondió que ahora los administradores manejan toda la información.

La quiebra de Spanair también puso en alerta a los pilotos. El representante del Sepla en el comité, Alberto Martínez, explicó que varios compañeros acudieron a la organización para avisar de que Sanitas no quiere atenderles y que les han suspendido la póliza. No saben si se debe a la quiebra o a que la compañía tampoco pagó el seguro médico.