Buch: "Vengo a transmitir optimismo, las vamos a pasar canutas, muy mal"
El nuevo consejero de Economía toma posesión del cargo Sustituye a Enrique Verdeguer, nombrado presidente de Adif
Máximo Buch se estrenó este lunes como consejero de Economía, Industria y Comercio con un realismo extremo: “Vengo a transmitir optimismo: las vamos a pasar canutas, muy mal”. En una breve intervención inmediatamente después de recibir la cartera de consejero de manos de Enrique Verdeguer, su predecesor en el cargo, Buch instó a los valencianos a afrontar la mala prensa sin arrugarse: “Tenemos que quitarnos rápidamente el pequeño complejo de inferioridad que tenemos. Somos muy buenos”.
Las graves estrecheces financieras que afronta la Generalitat después de años de alegría en el gasto público no se van a resolver de la noche a la mañana. “No va a ser un año fácil”. Pero el nuevo consejero asumió una prioridad clara: “Antes que cualquier otra cosa, que nuestros proveedores cobren”.
Buch ofreció un talante dialogante y capacidad para modificar su criterio si le ofrecen razones convincentes. Rodeado por todo el equipo de la consejería y por un nutrido grupo de representantes camerales o patronales, Buch invitó a sus “amigos empresarios” a trabajar “como una piña, sin autoflagelarnos”. “La gente de toda España todavía se quiere venir a vivir aquí aunque ahora nos critiquen”, concluyó.
Una hora antes, tras el solemne acto de jura del cargo de consejero en el Saló de Corts del Palau, el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra subrayó la experiencia empresarial del nuevo consejero de Economía, su inconformismo ante la situación actual y su capacidad como “experto financiero que ha ayudado a muchas empresas y entes a salir adelante”.
El relevo al frente de la consejería de Economía coincide con un momento crítico de situación financiera de la Generalitat. Las arcas públicas deben afrontar vencimientos de créditos por valor de unos cinco mil millones a lo largo del presente ejercicio y diversos proveedores de la Generalitat reclaman otros 2.500 millones en pagos atrasados.
Alberto Fabra aprovechó su asistencia al Comité Ejecutivo Nacional del PP, presidido por Mariano Rajoy, para entrevistarse con el presidente de Gobierno a media mañana y volver a pedirle ayuda para superar las estrecheces financieras que afronta. Fuentes del PP aseguran que Fabra detalló el ajuste de gasto que ha introducido el Consell en las cuentas para 2012 y que Rajoy lo consideró “adecuado”.
A media tarde, en el Palau de la Generalitat, Fabra instó al nuevo responsable de Economía a contribuir a restaurar la confianza. El presidente apuntó que Buch es “consciente de la situación actual” y que aportará su “experiencia y compromiso” para “aportar credibilidad”.
Despedida con humor
Enrique Verdeguer, por su parte, se despidió con un sentido discurso cargado de humor. El ya presidente del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) no ocultó los malos momentos que ha pasado durante su “breve pero muy intenso” mandato como consejero de Economía y la calidad como psicólogos de todos sus colaboradores y parientes. “Cuando estaba completamente abatido con la emisión de bonos minoristas —patética, que os voy a contar— mi madre todavía me decía: ‘Hijo mío, tu no has vivido una guerra civil”.
Verdeguer dijo vivir un “momento agridulce” al dejar el cargo con la “sensación de trabajo inacabado”, pero aseguró haber sentado “unas bases relativamente sólidas” para afrontar el actual momento económico.
Lo mismo que Buch, el consejero saliente concedió: “Los valencianos no estamos de moda”. Y lamentó la ausencia de sentido del humor en el debate político en las Cortes.
El empresario Buch
La entrada de Máximo Buch en el Consell que preside Alberto Fabra ha resultado tan sorprendente como el desembarco de Enrique Verdeguer hace siete meses en el Gobierno que entonces presidía Francisco Camps. Buch concedió ayer que conoció personalmente a Fabra hace unos días. Fue nombrado el viernes pasado. El nuevo consejero es un profesional conocido por toda la clase empresarial valenciana, pero nadie le impulsó a ocupar el cargo.
La propuesta vino del entorno del presidente de la Generalitat. Fabra recibió tres nombres y se decantó por la experiencia financiera de Buch para afrontar la compleja situación económica de la Generalitat. El sueldo de consejero es modesto, pero un empresario podría interpretar el cargo como una buena inversión.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.