‘Mauro’, de Mikel Guerendiain: novela satisfactoria sobre la mayor fuga de presos de la historia de España

No recuerdo quién propuso por primera vez el paralelismo, que tanto llegaría a repetirse de boca en boca, entre el género del western americano y las ficciones españolas sobre la Guerra Civil. En todo caso, fue una ocurrencia con chicha: es cierto que ambos períodos tienen mucho de clímax (fundacional o terminal, según se mire) para sus respectivas sociedades, pero la comparación funciona, sobre todo, si observamos el modo en que la etiqueta “novela de la Guerra Civil” es más bien una excusa de fronteras vagas para acoger propuestas de lo más variopintas, igual que sucede con las “películas del Oeste”, que, teniendo fama de parecerse todas, en realidad no podían ser más distintas entre sí.

Hace tiempo que la Guerra ya no ocupa un espacio central entre las preocupaciones de la narrativa de este país, del mismo modo que el western se ha instalado en una periferia más o menos prestigiosa de Hollywood, pero, cuando reaparece en algunas novelas, esa diversidad se hace evidente: si el año pasado David Uclés quiso ofrecer un gran tapiz de época con La península de las casas vacías, ahora llega el debutante Mikel Guerendiain (Ciaurriz, 41 años) y se marca una pieza mucho más pequeña, puramente artesana y centrada en un episodio histórico muy concreto, con Mauro, que es la crónica ficticia de una fuga ocurrida en 1938 cerca de Pamplona, en territorio bajo control insurreco. Huyeron unos 800 prisioneros que serían cazados y aniquilados como chinches, salvo algunos afortunados que lograron alcanzar la frontera.

“Artesana”, he escrito, pero también satisfactoria: y es que el autor demuestra que una estructura de peripecias calculadas al detalle y una buena polifonía de voces narrativas al modo clásico (clásico del siglo XX, quiero decir) siguen siendo recursos capaces de dar un rendimiento de cierta complejidad. Honesta y eficaz, Mauro juega con cartas más que reconocibles: el “alcaide” fascista de la prisión suena como todos sabemos que tiene que sonar un alcaide fascista, y lo mismo ocurre con el dignísimo profesor de historia, los presos republicanos que protagonizan la escapada del penal, la joven soñadora del pueblo, el sádico soldado perseguidor… Son arquetipos zambullidos en una trama no menos arquetípica (y muy cinematográfica, ya que estamos), pero cuidado: en ello no hay trampa, sino intención, y no he utilizado en vano el verbo “jugar”, porque Guerendiain se acoge a todas estas claves genéricas más o menos encorsetadas con el objetivo de introducir variaciones tan leves y coherentes con el modelo al que se acoge como enriquecedoras, y ahí es donde entran las pulsiones secretas de un sacerdote, las ambigüedades del soldado Germán o la atmósfera esbozada del entorno rural norteño… Todo ello, sin olvidar que la artesanía consiste en una muestra de amor al oficio, y aquí esta regla se cumple a la perfección.

Con pulcritud metódica, Mauro revela un cariño exquisito del autor por la historia que cuenta, por dramática y a veces terrible que sea, y ese cariño se contagia al lector, que avanza por sus páginas a ritmo de fuga desesperada. Así, leerla es reconciliarse con los esquemas clásicos de la novela, digamos, “figurativa” (que no es, en principio, la que a mí más me interesa), en un texto que además se beneficia de la experiencia de Guerendiain como dramaturgo, y hasta diría que de su faceta docente, no en vano el libro aspira a sintetizar los aspectos ideológicos de la Guerra encarnándolos en los discursos de sus personajes. Por seguir con la comparación con el mundo del western, leer Mauro equivaldría a acercarse a un trabajo de Budd Boeticher, o algo parecido: una historia recia construida con realismo, fascinación por un paisaje que equivale a una temperatura moral, técnicas solventes de toda la vida y mucha convicción en la perdurabilidad de la memoria histórica como generadora de fábulas humanas que siguen resonando en el presente. Un ejemplo de narrativa sólida.

Mauro

Mikel Guerendiain
Los Aciertos & Pepitas de Calabaza, 2025
192 páginas
18,90 euros