Las 10 mejores series de 2022
La ficción televisiva del año se ha movido entre el conflicto íntimo y los mundos de fantasía
Del conflicto íntimo a las grandes franquicias. De las superproducciones de fantasía a las historias atadas a la tierra. Volver la mirada sobre las series de 2022 dice mucho sobre el ser humano en el mundo actual. Se pregunta por su propia identidad y trata de lidiar con la ansiedad y con el duelo, y a la vez, recurre a mundos soñados para huir del día a día, buscar respuestas o, simplemente (como si en realidad fuera simple), entretenimiento.
Muchos de los títulos más aplaudidos por la crítica en 2022 tienen detrás reflexiones profundas e íntimas. La ansiedad y el duelo dominan al protagonista de The Bear (Disney+) con el ritmo frenético de una cocina de fondo. La búsqueda de conexión humana mueve a los personajes de la comedia dramática Somebody Somewhere (HBO Max). La reivindicación de la memoria de las abuelas y la herencia compartida dan su particular sabor a Pachinko (Apple TV+). El conflicto sobre la propia identidad está detrás de la distopía que plantea Separación (Apple TV+). La angustia vital de una juventud perdida preside Euphoria (HBO Max). Y la exposición de las diferentes formas en que se manifiesta el racismo es el fondo del viaje surrealista que propone Atlanta (Disney+). Conflictos religiosos atormentan al detective protagonista de Por mandato del cielo (Disney+). En la cosecha británica han destacado dramas como la cruda In My Skin (Filmin), sobre una adolescente lidiando con la enfermedad mental de su madre, y la combinación de drama realista y comedia negra con la que Esto te va a doler (Movistar Plus+) reivindica la sanidad pública.
En el otro lado de la balanza, una de las series más celebradas en Estados Unidos este año ha sido Colegio Abbott (Disney+), una comedia al estilo falso documental emitida en la televisión en abierto y con profesores de la escuela pública infantil como protagonistas. Lejos de las sombrías tendencias que dominan la televisión actual, sus personajes llenos de buenas intenciones la han convertido en una de las favoritas de los estadounidenses. También repitieron éxito los tres investigadores y podcasters amateurs de Solo asesinatos en el edificio (Disney+) con su peculiar combinación de comedia y suspense.
Para llegar al gran público, las plataformas saben que tienen más opciones si recurren a marcas ya conocidas. Las dos mayores superproducciones que se han estrenado este año en la televisión tenían detrás títulos asentados en el imaginario colectivo y mundos de fantasía. La casa del dragón (HBO Max), la precuela de Juego de tronos, trasladó los conflictos familiares propios de un culebrón a la casa Targaryen y sus dragones. Al mismo tiempo, El señor de los anillos: Los anillos de poder (Amazon Prime Video) viajó al pasado de la Tierra Media para que el espectador se reencontrara con elfos, enanos y pelosos.
La fantasía se ha hecho fuerte este año con títulos como la adaptación de los cómics Sandman (Netflix) o la continuación del clásico de los ochenta Willow (Disney+). Fantasía, nostalgia y un toque cada vez más oscuro marca el camino de los jóvenes protagonistas de Stranger Things, que dominó la conversación al comienzo del verano con su cuarta temporada. La franquicia Star Wars ha tenido dos potentes representantes con Andor y Obi-Wan Kenobi, mientras que Marvel ha sumado Caballero Luna, She-Hulk y Ms. Marvel (todas ellas en Disney+). Y si hablamos de explotación de marcas conocidas, habría que mencionar el último gran fenómeno televisivo del año, Miércoles (Netflix), que recupera el universo de La familia Addams.
Las historias basadas en hechos reales dominaron la primera mitad del año. Desde The Staircase (HBO Max) hasta The Dropout (Disney+), pasando por Pam & Tommy (Disney+), Tiempo de victoria (HBO Max) o ¿Quién es Anna? (Netflix), todas han tomado como base historias y personajes recientes para convertir en ficción sus casi increíbles historias. La reina actual de todas las series basadas en hechos reales, The Crown (Netflix), ha lanzado recientemente su quinta temporada con Lady Di y Carlos de Inglaterra en el centro. Pero si dirigimos la mirada a esos juegos con la realidad desde la ficción, imposible rizar más el rizo que Los ensayos (HBO Max), un cruce de experimento social y análisis psicológico del ser humano comandado por Nathan Fielder.
Better Call Saul puso fin a la era Breaking Bad (Movistar Plus+) con una muy celebrada sexta temporada. Más discretamente se fueron los zombis de The Walking Dead (Fox) —aunque volverán en numerosas secuelas—. Este año se apagó la risa de Diane Lockhart con el final de The Good Fight (Movistar Plus+) y los Peaky Blinders (Netflix) y la familia Byrde de Ozark (Netflix) pusieron fin a sus negocios criminales en pantalla.
La producción española también ha seguido patrones parecidos. El conflicto interior, el duelo, el drama personal y la búsqueda de la propia identidad presiden apuestas como Días mejores (Amazon Prime Video), Las de la última fila (Netflix), Intimidad (Netflix) o Autodefensa (Filmin). Incluso el viaje a la Valencia noventera de La Ruta (Atresplayer Premium) está dominado por los conflictos internos de sus personajes, y razones emocionales empujan al protagonista de No me gusta conducir (TNT) a intentar sacarse el carné. Y mientras, el éxito de Entrevías (Telecinco) en la televisión en abierto fue la resistencia en un panorama poblado por el dominio de la ficción turca.
Las 10 mejores series del año
Solo asesinatos en el edificio
Temporadas: 2.
Género: Comedia. Misterio.
Intérpretes: Steve Martin, Selena Gomez, Martin Short.
Nacionalidad: EE UU.
Duración: 30 minutos.
No era menor el reto al que se enfrentaba la serie revelación del año pasado: mantener el nivel sin caer en la autocomplacencia ni el disparate. Lo ha superado apostando por el continuismo, tan solo lavar y marcar. Siguen ahí la extraordinaria química del trío protagonista, el disparatado grupo de vecinos capaces de robarle el plano a Shirley Maclaine y los diálogos hawksianos rebosantes de puyas intergeneracionales (“es como ver El juego del calamar sin subtítulos”). En esta temporada, el Arconia muestra su corazón: el real, los pasadizos tras el suntuoso papel pintado, y el metafórico, Bunny Folger; el capítulo dedicado a su último día ejemplifica la principal fortaleza de la serie: su capacidad para aunar ternura, sátira, melancolía y humor vitriólico sin perder el equilibrio.
Por Eva Güimil
- Misterioso asesinato en Arconia: crítica de Eva Güimil
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Better Call Saul
Temporadas: 6.
Género: Drama. Comedia. Thriller.
Intérpretes: Bob Odenkirk, Jonathan Banks, Rhea Seehorn, Michael McKean.
Nacionalidad: EE UU.
Duración: 47 minutos.
El universo televisivo creado por Vincent Gilliam y Peter Gould a partir de Breaking Bad encuentra en esta serie su gran culminación. Better Call Saul partía de esa gran serie (el octavo episodio de la tercera temporada se llamaba así y existen cientos de referencias cruzadas entre las dos) y pretendía ser una comedia. Seis temporadas después, la historia del abogado chanchullero Jimmy McGill (o Saul Goodman) ha ido mucho más allá del simple spin off y se ha convertido en una de las mejores series de los últimos tiempos. Un producto inclasificable y arriesgado pero que funciona y destaca en la era de las series hechas como fotocopias.
Por Juan Carlos Galindo
- El adiós de ‘Better Call Saul’ pone fin a una era, artículo de Natalia Marcos
- Better Call Saul’ y la estética de la crueldad, análisis de Sergio del Molino
The Bear
Temporadas: 1.
Género: Drama. Comedia.
Intérpretes: Jeremy Allen White, Ebon Moss-Bachrach, Ayo Edebiri, Lionel Boyce.
Nacionalidad: EE UU.
Duración: 30 minutos.
El chef de un prestigioso restaurante regresa a casa en Chicago para hacerse cargo del local de bocadillos que regentaba su hermano. El ritmo frenético y el estrés extremo que se vive en las cocinas marca el paso en este asfixiante e hipnótico drama con capítulos de media hora en los que se cuela la vida entera, con lo bueno y lo malo. Rodada con pulso y un estilo casi naturalista, esta serie refleja a la perfección la adrenalina y la montaña rusa de un cocinado y los altibajos de la vida. Mientras que el protagonista trata de lidiar con sus ataques de ansiedad y un proceso de duelo no completado que le ha dejado con un millón de dudas sin resolver, se van desenmarañando la vida y la forma de ser de los trabajadores del local. El séptimo episodio, rodado en plano secuencia, es una muestra de virtuosismo televisivo.
Por Natalia Marcos
Hacks
Temporadas: 2.
Género: Comedia. Drama.
Intérpretes: Jean Smart, Hannah Einbinder, Rose Abdoo, Hayes Beyersdorfer.
Nacionalidad: EE UU.
Duración: 30 minutos.
A Hacks llegamos en un principio por las risas, brillantes y ácidas, y nos quedamos a vivir en ella por sus amargas y soterradas lágrimas. En torno a ambas construyen sus dos mujeres protagonistas, de generaciones y entornos muy diferentes, un vínculo que va más allá de la sororidad. Los varios universos que separan dos ciudades relativamente cercanas como Los Ángeles y Las Vegas enfrentan a Ava, una guionista televisiva milenial sabelotodo cancelada por un chiste en Twitter sobre un senador gay en el armario, y Deborah, una veterana reina del monólogo de casino que lleva décadas luchando con uñas, laca, lentejuelas, tacones y dientes por mantenerse en la cima. Del enfrentamiento inicial pasamos a la odisea conjunta sobre un autobús, a golpe de fracasos y epifanías. El humor cínico es para ellas solo un antídoto momentáneo contra la soledad. Que esta comedia sea más que Jean Smart, su legendaria actriz principal, es todo un logro de sus creadores.
Por Héctor Llanos
- ‘Hacks’ o lo diálogos de una monologuista, columna de Ángel S. Harguindey
- Comedia joven y comedia vieja, columna de Sergio del Molino
No me gusta conducir
Temporadas: 1.
Género: Comedia.
Intérpretes: Juan Diego Botto, Lucía Caraballo, David Lorente, Leonor Watling.
Nacionalidad: España.
Duración: 25 minutos.
Una premisa sencilla (un melancólico y amargado profesor universitario recién separado que se apunta a la autoescuela pasados los 40) sirve de punto de partida a una comedia que sabe ser inteligente y divertida, algo que no siempre va unido en el género. Un excelente Juan Diego Botto lidera un reparto lleno de aciertos y con algunos secundarios sobresalientes. Maravilloso David Lorente como profesor (él diría “educador”) totalmente entregado y con algunas de las mejores frases del guion. El tono y la idea de limitarlo a seis capítulos juega muy a favor. Su creador, Borja Cobeaga, cambia de nuevo de registro para volver a dar en el clavo.
Por Juan Carlos Galindo
Borja Cobeaga: “Tardé más en sacarme el carné que en hacer esta serie”, entrevista de Natalia Marcos
The Good Fight
Temporadas: 6.
Género: Drama.
Intérpretes: Christine Baranski, Rose Leslie, Cush Jumbo, Delroy Lindo.
Nacionalidad: EE UU.
Duración: 60 minutos.
Desde 2009, la risa de Diane Lockhart ha alegrado la televisión, primero como secundaria en The Good Wife y después protagonizando The Good Fight. La abogada interpretada por Christine Baranski se ha despedido este año con una sexta temporada que ha situado a sus protagonistas en unos Estados Unidos al borde de la guerra civil como reflejo de la crispación y polarización política actual. La serie que mejor ha explicado la locura de los Estados Unidos de Trump, satirizándolos y llevándolos al extremo, ha sido a veces excesiva, otras, surrealista, y siempre ha jugado en el alambre, a punto de caer. Pero lograba mantenerse, milagrosamente. Que salga en esta lista en una temporada que no ha sido la mejor sirve como homenaje a todo lo que nos han dado Diane Lockhart y compañía.
Por Natalia Marcos
Adiós con una carcajada a Diane Lockhart, columna de Paloma Rando
Los ensayos
Temporadas: 1.
Género: Drama. Comedia. Documental.
Intérpretes: Nathan Fielder, Chase Maser, Andrea M. Anderson.
Nacionalidad: EE UU.
Duración: 28 minutos.
Si al recomendar Los ensayos, alguien pide que la describas, no va a ser fácil. ¿Género? Digamos que comedia documental existencialista. Pero eso no abarca su magnitud. ¿Y de qué va? Un hombre te ayuda a preparar y replicar al detalle la decisión más relevante de tu vida hasta que aprendas a enfrentarla. Tal vez sea un reality de autoayuda. Eso no le haría justicia. ¿O es en realidad una ficción envuelta en metalenguaje? Si lo es, su inadaptado creador, Nathan Fielder, se lo llevará a la tumba. Quizás sea todo eso, y también nada resumible en una frase. O sí: puedes decir que es algo único, nunca antes hecho. Y te quedas tan a gusto. Eso ya la hace merecedora de ser lo mejor de 2022. Pero no solo es una estrambótica fachada. También busca respuestas; las respuestas más importantes de la existencia. Desquiciada, loca y, por mucho que la ensayes, impredecible.
Por Eneko Ruiz Jiménez
En ‘Los ensayos’, la vida es cuestión de prueba y error, artículo de Natalia Marcos
Separación
Temporadas: 1.
Género: Thriller. Ciencia ficción.
Intérpretes: Adam Scott, Patricia Arquette, John Turturro, Britt Lower.
Nacionalidad: EE UU.
Duración: 45 minutos.
¿Y si pudiéramos separar totalmente nuestra vida laboral de la personal? Una empresa permite hacerlo con la implantación de un chip que genera algo así como dos versiones de una misma persona en un solo cuerpo. La versión que trabaja no sabe qué hace su yo de fuera y viceversa. Pero algunos trabajadores de Lumon Industries empiezan a hacerse preguntas: ¿qué hacen realmente en esa empresa? ¿Qué ocurre con los trabajadores que desaparecen? ¿Cómo es su propia vida fuera de allí? Con una estética muy particular y un ritmo que acentúa la tensión, este distópico thriller protagonizado por Adam Scott y dirigido por Ben Stiller ha sido una de las series más adictivas y originales del año y que más interrogantes y teorías generó a su alrededor.
Por Natalia Marcos
El verdadero terror laboral, columna de Sergio del Molino
Pam & Tommy
Temporadas: 1.
Género: Drama.
Intérpretes: Lily James, Sebastian Stan, Seth Rogen, Nick Offerman.
Nacionalidad: EE UU.
Duración: 45 minutos.
Si no fuera porque ocurrió, que la distribución de uno de los vídeos porno más famosos de la historia se debiera a que una estrella de rock (Tommy Lee, de la banda Mötley Crüe) humillara y no pagara a un carpintero tiene aroma a increíble por lo estúpido del asunto. También a justicia poética, si no fuera porque el vértice que completa el triángulo era una mujer, en aquel momento una de las más deseadas de la Tierra, Pamela Anderson, que sufrió el desprecio, los comentarios misóginos y los murmullos sarcásticos de medio planeta. Pam & Tommy está escrita 25 años después de los hechos, y, por ello, lucha por restaurar la imagen de la actriz de Los vigilantes de la playa. Mal planteamiento. Mucho mejor es el tono de looney tunes de casi todos los episodios, el reflejo de la locura que rodeaba a un matrimonio imposible y a un chapuzas que descubrió en sus carnes que internet es un negocio en el que siempre se enriquecen otros.
Por Gregorio Belinchón
‘Pam & Tommy’: historia del primer vídeo sexual viral, artículo de Natalia Marcos
La ruta
Temporadas: 1.
Género: Drama. Comedia.
Intérpretes: Àlex Monner, Elisabet Casanovas, Claudia Salas, Guillem Barbosa.
Nacionalidad: España.
Duración: 50 minutos.
Una pandilla desmembrada, un duelo, una escena musical desnortada en sus últimos años… La ruta parte del final de su historia para retroceder dos años en cada capítulo en lo que podría denominarse una historia de entrada en la madurez a la inversa: vemos a sus personajes rejuvenecer y a la ruta del bakalao volver a sus horas de gloria muy alejadas de la imagen que el sensacionalismo quiso dar de ella. Sabemos que la historia no acaba bien —de ahí parte su primer episodio—, pero esa melancolía lejos de alejarnos de los personajes, nos invita a bailar con ellos en una fiesta que disfrutar como si fuera la última.
Por Paloma Rando
- ‘La ruta’: por qué nos invade la nostalgia del ‘after’, análisis de Noelia Ramírez
- ‘La ruta’ desanda los pasos del bakalao y la movida valenciana en busca de su lado más luminoso y desconocido, artículo de Héctor Llanos
Selección de Eva Güimil, Natalia Marcos, Héctor Llanos, Jimina Sabadú, Paloma Rando, Juan Carlos Galindo, Gregorio Belinchón, Sergio del Molino y Eneko Ruiz.
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