Carme Pinós: “El concepto de transparencia es irreal”
La arquitecta barcelonesa expone una retrospectiva de sus trabajos en el Museo ICO de Madrid
Autora de obras como la Torre Cube en Guadalajara (México), la Escuela Massana de Barcelona o el CaixaForum de Zaragoza, la arquitecta barcelonesa Carme Pinós, de 66 años, expone su obra en el Museo ICO de Madrid.
¿Qué le hizo querer ser arquitecta?
Supongo que fue el ambiente familiar, mi padre quería que su hijo mayor fuera arquitecto, al no querer serlo, asumí que tenía que ser yo.
¿Qué obra ajena le habría gustado firmar?
Me hubiera encantado ser Le Corbusier, pero no lo soy.
De no ser arquitecta le habría gustado ser…
Imaginarme en otra profesión sería ser otra persona en la que no me reconozco.
¿Como arquitecta ha visto más prejuicios en un despacho o en una visita de obra?
He sentido muchas veces y en muchos ambientes problemas de confianza.
¿Qué aprendió trabajando en México que no había aprendido trabajando en Europa?
La complicidad entre cliente y técnico basada en la confianza mutua.
¿Qué es lo más bonito que ha oído decir de un edificio suyo?
Me lo dijo una profesora de la Massana cuando coincidimos en el ascensor de la escuela, me comentó que el edifico le hacía ir muy feliz al trabajo cada día.
¿En qué se fija cuando va de visita a un edificio proyectado por usted?
Siempre ando preocupada por la buena ejecución.
¿Qué tres cosas no deberían faltar en la vivienda ideal?
Luz natural, circulación de aire y generosidad de espacios.
Recomiéndenos un libro de arquitectura para no iniciados.
La ciudad en la historia de Lewis Mumford.
Y díganos el último libro que le ha gustado.
El corazón del mundo de Peter Frankopan.
¿Cuál es la película que más veces ha visto?
Tendría que decir In the mood for love porque participé en una mesa redonda sobre ella, pero creo que es más significativo comentar que he visto por lo menos seis veces casi todas las de Alfred Hitchcock.
Si tuviese que usar una pieza musical como autorretrato, ¿cuál sería?
Le Boeuf sur le toit de Darius Milhaud.
¿Qué está socialmente sobrevalorado?
La transparencia. El concepto de transparencia es irreal, siempre son maneras de mostrar... Prefiero la honestidad y, en otro sentido de la palabra, lo que se insinúa…
¿A quién le daría el próximo premio Pritzker?
No tengo suficiente conocimiento de la arquitectura contemporánea para poder escoger el “number one”.
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