9 dudas muy íntimas que nos daba pudor plantear al ginecólogo, resueltas
Un montón de preguntas en torno a la vagina, respondidas por cinco especialistas de prestigio
¿Cuántas veces ha pensado por qué le ocurre? ¿Cuántas se ha preparado para preguntárselo al ginecólogo cuando llegara a la consulta y, en el momento de hacerlo, no se ha atrevido? Si hace unos meses le animamos a no callarse ninguna información frente al especialista que aborda las enfermedades propias de la mujer, hoy hacemos lo mismo con las dudas que nos asaltan: ¡fuera pudor! Pero, mientras encuentra el valor, interrogamos por usted. Y cinco ginecólogos responden.
1. ¿Es normal tener un labio vaginal mucho más grande que otro?
“Cierta asimetría es normal entre partes corporales como mamas o labios vulvares, sobre todo los menores”, responde Víctor Martín, jefe de Ginecología y Obstetricia del Hospital Quirónsalud de Valencia. “Podemos observar cambios en diferentes etapas de la vida, en la pubertad, durante el embarazo, después del parto o a lo largo de la menopausia”, porque, tal y como recuerda Adriana Paredes Ríos, ginecóloga y obstetra del Hospital General Universitario de Valencia, experta en cirugía reconstructiva de suelo pélvico y miembro de TopDoctors, “no somos simétricos de manera perfecta".
Una cosa distinta sería sufrir una hipertrofia: que uno o los dos labios sean de un tamaño exagerado. Sin embargo, es poco frecuente. "Corregirlo con cirugía dependerá de la molestia física o estética que pueda producir”, advierte el doctor Martín.
"El aspecto de los genitales cada vez está cobrando más importancia, fundamentalmente debido a la moda creciente de la depilación integral, que los expone", reconoce Jackie Calleja, ginecólogo director del Centro Bmum, Aravaca y Pozuelo y especialista en Ginecología y Obstetricia en Hospital Quirónsalud Madrid.
2. ¿Es mala la depilación integral?
“Ni buena ni mala. Es una cuestión de estética y comodidad que no tiene implicaciones ginecológicas”, opina Adriana Paredes Ríos. Tampoco es “más higiénica”, contrariamente a lo que se pueda pensar, apunta Víctor Martín. Dependiendo de cómo se realice, “puede ocasionar heriditas microscópicas en la piel que favorezcan la entrada de gérmenes y se produzcan infecciones”. Él recomienda la depilación láser frente a la “cera, cuchillas o maquinitas”.
Para el jefe de la Sección de Obstetricia y Ginecología del Hospital 12 de Octubre de Madrid, Jesús Grande, se trata de una cuestión de “modas” y, como sus colegas, insiste en que “el vello, en todas las zonas del cuerpo y también en esta, protege frente a agentes externos”.
"La vagina es un órgano en forma de tubo, dotado de fibras musculares que hacen que se contraiga y se relaje, e incluso que durante las relaciones sexuales aumente de longitud" (Jackie Calleja, ginecólogo director del Centro Bmum)
La depilación integral elimina esa función protectora, por lo que son algo más frecuentes las infecciones vulvovaginales. "Aunque no serían procesos graves que deterioren de forma notable la salud vaginal de la mujer”, observa Jackie Calleja. Lo ideal, según Carmen Menéndez, jefa de Atención de la Unidad de la Mujer del Instituto Palacios de Salud y Medicina de Mujer, es “una depilación adecuada que cubra los labios mayores, la parte interna de la vulva”.
3. ¿Puedo sentir cierta excitación cuando hago pis?
“Anatómicamente, la uretra está situada en la parte anterior de la vagina”, delimita la responsable del Instituto Palacios, Carmen Menéndez. “El complejo clitouretrovaginal (CUV) es un elemento fundamental en el proceso de la excitación. La esponja uretral que envuelve la uretra forma parte de este complejo. Ese tejido eréctil, junto con el clítoris y los bulbos vestibulares (unas bolsitas eréctiles que rellenan los labios mayores), intervienen de forma activa en el orgasmo femenino. Por tanto, la zona de la entrada de la vagina, el clítoris como órgano eréctil fundamental y parte de la uretra externa, están implicadas de forma notable en el orgasmo femenino”, continúa el director de Bmum, Jackie Calleja.
De esta forma, “orinar implica el estímulo de ciertas terminaciones nerviosas que muchas veces comparten trayecto con las que se encargan de producir placer sexual. Hay que tener en cuenta que este acto no deja de ser un alivio en muchas circunstancias, y puede percibirse como algo liberador o incluso agradable en un momento dado”, explica el ginecólogo de Valencia Víctor Martín. Además, “como consecuencia de la distensión de la vejiga al aumentar mucho su capacidad y al vaciarla de forma súbita, se puede producir una sensación de alivio o de cierto placer, dado que se segregan hormonas del tipo endocrinas". Para Calleja, por tanto, no es raro que en un momento así se experimente algo de placer. Pero son ocasiones muy extrañas de las que no hay evidencia científica. "En estos casos, la mente de cada persona juega un papel muy importante”, zanja el jefe de la Sección de Obstetricia y Ginecología del Hospital 12 de Octubre de Madrid, Jesús Grande.
4. ¿Es normal que mi vagina sude?
“La vagina no suda, pero hay glándulas sudoríparas en la piel de los labios mayores y menores, además de en la piel del pubis, muslos y nalgas”, describe la ginecóloga del Hospital General Universitario de Valencia, Adriana Paredes Ríos. Puede que lo que pensemos que es sudor sea, en realidad, un aumento de secreción del flujo vaginal, porque tanto la vagina como el cuello del útero tienen su humedad, ranuras mucosas y transpiración. "Según la fase del ciclo en la que se encuentre, estará más o menos humedecida. Los días previos a la regla, la vagina está más seca; y alrededor de la ovulación, más húmeda. También dependerá de si se han tenido relaciones sexuales o no”, indica la ginecóloga y mastóloga Carmen Menéndez.
5. ¿Qué puedo hacer para evitar los gases vaginales durante las relaciones sexuales?
“Durante los encuentros íntimos, se puede producir una relajación del esfínter anal y es normal la expulsión de gases”, indica Jesús Grande. Puede ocurrir en algunas posturas concretas y a algunas mujeres. “La vagina es un órgano en forma de tubo, dotado de fibras musculares que hacen que se contraiga y se relaje, e incluso que durante las relaciones sexuales aumente de longitud, debido a que se extienden los pliegues o rugosidades con las que cuenta”. Sería algo parecido a “estirar un acordeón”, compara el director del centro médico Bmum, que continúa explicando que determinadas posturas favorecen la entrada de aire. En su opinión, no se debe a “incontinencia o debilidad de las paredes vaginales, sino que es un hecho normal fruto de la contracción y relajación de la pared vaginal”.
“Durante los encuentros íntimos, se puede producir una relajación del esfínter anal y es normal la expulsión de gases” (Jesús Grande, responsable de Sección de Obstetricia y Ginecología del Hospital 12 de Octubre)
Los expertos advierten de otras posibles causas, como que haya una “hiperlaxitud de las paredes vaginales, sobre todo en mujeres de cierta edad o que han dado a luz”. En estos casos, los ejercicios de Kegel o bolas vaginales ayudan.
6. Si uso bolas para fortalecer el suelo pélvico, ¿las notaré y me excitaré?
"Notarlas, perfectamente. Es una introducción de un cuerpo extraño”, responde Carmen Menéndez. Aun así, depende de la mujer. “Y la excitación dependerá del momento psicológico en que su portadora se encuentre”, considera Jesús Grande. “Si las usas como fricción, te excitarás, pero no es el objetivo de las esferas intravaginales [bolas chinas de uso terapéutico]”, apunta la doctora Menéndez. Tampoco sería descabellado. Las especialistas tranquilizan: "Si sucede, no hay que avergonzarse".
7. ¿Cómo puedo evitar acné en mi zona íntima?
“En la zona perineal [región anatómica que corresponde al suelo pélvico] hay vello y es normal que se pueda producir la infección de algún folículo formando un pequeño acúmulo con pus similar al acné. Se puede evitar con una buena higiene de los genitales externos”, recomienda Jesús Grande. Que esto se produzca de manera más o menos frecuente, dependerá de cada mujer y de la composición de su piel, si es más o menos grasa. Los tratamientos serían los mismos que en otros lugares del cuerpo: “Soluciones limpiadoras desinfectantes o tratamientos hormonales”, aconseja Víctor Martín.
Además, según Carmen Menéndez, sería bueno no usar ropa interior de tejidos sintéticos de muchos colores y evitar la depilación con maquinilla en los días previos a la regla. Adriana Paredes Ríos, por su parte, propone utilizar la “depilación láser para disminuir los folículos y que estos se taponen, evitar la obesidad y el sobrepeso y mantener una alimentación equilibrada”.
8. ¿Es normal que mi vagina desprenda mal olor?
"Puede tratarse, simplemente, de un cambio de niveles hormonales de carácter transitorio”, advierte Víctor Martín, jefe de Ginecología y Obstetricia del Hospital Quirónsalud de Valencia. “Tanto el olor como el flujo pueden modificarse según el día del ciclo, si se usan o no anticoncepciones y cuáles, si se toman fármacos, según el compañero sexual o incluso la alimentación”, añade Adriana Paredes. Todos coinciden en que “la secreción vaginal no huele” y que cuando esto ocurre, “la mayor parte de las veces se debe a una infección”, subraya Jesús Grande, responsable de Sección de Obstetricia y Ginecología del Hospital 12 de Octubre.
Si además cambia el color del flujo, los médicos aconsejan acudir al ginecólogo, "porque estas infecciones tienen tratamiento local y no suponen un riesgo para la mujer”. De hecho, “son muy frecuentes en las mujeres en edad fértil y por tanto sencillas de diagnosticar y tratar”, tranquiliza el ginecólogo Jackie Calleja.
9. ¿Por qué lubrico sin estar excitada?
“La lubricación se produce por la secreción de glándulas que hay en la vagina y la vulva. A veces lo que algunas mujeres creen que es lubricación es flujo, y esto es un mecanismo de autolimpieza que tiene el aparato genital femenino. Es normal que la cantidad sea considerable y se preste a confusión”, explica Jesús Grande.
Esa secreción variará según el momento del ciclo en el que se encuentre. También de si toma o no anticonceptivos. Si no lo hace, lo habitual es que “note mucha más lubricación a mitad del ciclo”, añade Adriana Paredes Ríos. "La lubricación evita la sequedad y, por tanto, la incomodidad vaginal”, incide el director de Bmum. “Si no ocurre así, tendremos problemas de hidratación”, apunta Carmen Menéndez.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.