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Reportaje:

El 'Guernica' de la barbarie en Irak

Siah Armajani presenta en el Artium su denuncia del bombardeo de Faluya por EE UU

Hace 70 años, un día como hoy, la aviación nazi, en colaboración con el general Francisco Franco, bombardeaba Gernika (Vizcaya), inaugurando la infausta lista de ataques aéreos indiscriminados contra la población civil. Pablo Picasso pintó como denuncia de aquel crimen Guernica, una de las obras de arte que mejor reflejan la barbarie humana. La semana pasada se inauguró en el Artium la exposición Fallujah, del artista iraní Siah Armajani (Teherán, 1939), obra que bebe del cuadro de Picasso y que denuncia otro acto de guerra: el bombardeo de la ciudad iraquí de Faluya por el ejército de EE UU, en el que murieron 6.000 civiles.

La inauguración de Fallujah en el Artium supone también la presentación internacional de la obra que Siah Armajani terminó el 29 de agosto de 2005. La censura que se vive en Estados Unidos con todo lo referente a la guerra de Irak ha impedido que este creador iraní residente en el país americano haya podido presentar su obra, ni siquiera en una galería de arte privada. "Durante toda mi vida artística he contado con facilidad para exponer mi trabajo, incluso cuando era joven. Y ahora, a los 68 años, he tenido que pedir ayuda a amigos españoles para poder presentar mi trabajo", explicó el creador.

El iraní no ha podido presentar su obra en EE UU, donde reside, por la censura

Armajani, que ya ha presentado algunos de sus trabajos en Madrid y Barcelona, habló concretamente con la historiadora del arte María Dolores Jiménez-Blanco, quien le gestionó la posibilidad de presentarlo en el Artium, en Vitoria, muy cerca de Gernika. Todo un estímulo para el creador iraní, ya que en su obra no faltan las referencias al Guernica de Picasso. Fallujah es una instalación que surge de una fotografía de aquel bombardeo, en la que una familia consigue salvar algunas de sus pertenencias de su casa, semidestruida.

La pieza creada por Armajani recupera ese momento crítico y patético de indefensión ante un ataque indiscriminado, la tragedia de aquel bombardeo en el que 36.000 de las 50.000 casas de la ciudad iraquí de Faluya fueron destruidas, al igual que 60 de sus 200 mezquitas. Muchos de sus antiguos residentes no han regresado: viven en campamentos de refugiados, desplazados en otras ciudades iraquíes o emigrados fuera del país.

El director del Artium, Javier González de Durana, afirmó en la presentación de la muestra que "inevitablemente, y por desgracia, a cada generación le toca readaptar el Guernica a las circunstancias de cada época". Fallujah es una obra formalmente muy distinta al Guernica, aunque tiene ciertas referencias a la pintura de Picasso; unas directas, como las llamas del edificio y la lámpara, y otras más distantes, como la presencia de un caballo o las ventanas.

Siah Armajani representa una casa pequeña, de dos pisos, el segundo de los cuales se ha derrumbado sobre el primero aplastando los objetos y las personas (a las que no se ve) que se encontraban en el dormitorio. Un caballito de balancín, una alfombra, una jaula vacía y otros objetos de uso cotidiano añaden dramatismo a esta obra.

Jiménez-Blanco, presente en la inauguración, se refirió a la tan traída y llevada vinculación del artista con lo que ocurre en el mundo, el compromiso político o ético del creador. "Tanto la censura de su obra en Estados Unidos, como que su presentación coincida con el 70º aniversario del bombardeo de Gernika, no deja lugar a dudas sobre la capacidad del arte para comprometerse con la sociedad", comentó.

Siah Armajani reside en Estados Unidos desde 1960. Su trabajo está marcado por un intenso carácter social, con abundantes referencias al anarquismo. Merecen citarse sus obras de mobiliario urbano como la Mesa de picnic de Huesca (1998); los puentes, como el First bridge de White Bear Lake en Minnesota (1986); o sus salas de lectura, como la denominada Sacco and Vanzetti Reading Room del Museo de Arte Moderno de Francfort. Su obra se caracteriza por su carácter abierto y su capacidad para la sorpresa y el descubrimiento.

Un visitante observa la instalación <i>Fallujah</i> en el Artium.
Un visitante observa la instalación Fallujah en el Artium.PRADIP J. PHANSE

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