Muere la pintora y escultora francesa Niki de Saint-Phalle
Las alegres Nanas han acabado con su creadora. La escultora y pintora francesa Niki de Saint-Phalle murió ayer en San Diego (California) a los 71 años de edad, tras una larga enfermedad pulmonar que su familia cree derivada de los vapores tóxicos inhalados a partir de los materiales utilizados en su obra, de desecho muchos de ellos.
Nacida en 1930 en Neuilly-sur-Seine, hija de un banquero francés y de una estadounidense perteneciente a la alta sociedad, su infancia se vio afectada por las tendencias incestuosas de su padre y su juventud quedó marcada por una depresión nerviosa. Se casó a los 19 años con el escritor Harry Matthews, con el que tuvo dos hijos, y se divorció para contraer matrimonio con el escultor suizo Jean Tinguely, con quien firmó parte de su obra. Tras la muerte de éste en 1991 se instaló en San Diego, a la búsqueda de un clima seco con el que proteger sus bronquios.
La primera gran exposición data de 1961: Tiros con carabina, pinturas en relieve en las que se invitaba a los espectadores a disparar contra globos llenos de pintura que, al romperse, corría sobre los lienzos. A partir de 1964 popularizó las Nanas, abigarradas caricaturas de la condición femenina, a veces gigantescas, impregnadas de un humor insolente y a menudo instaladas al aire libre. Una de sus obras es Elle o la mayor puta del mundo, realizada para el museo de arte moderno de Estocolmo: un monstruo femenino de 23 metros de longitud. En París hay otras en la fuente Stravinski, junto al Centro Georges Pompidou, al que legó varias obras por su amistad con la esposa del ex presidente de la República. Figura de proa del movimiento de los nuevos realistas, el mundo cultural y político de Francia le rindió ayer homenaje. El presidente Jacques Chirac saludó a 'una mujer excepcional' que 'supo construir una obra de una rara originalidad'.
Babelia
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