"Mecano nos estaba devorando"
Nacho Cano ha llegado a una síntesis. Después de la ruptura de Mecano y su primer disco en solitario, prácticamente instrumental, vuelve ahora con un segundo trabajo que reúne ambas vivencias musicales. El lado femenino saca a la luz los rincones mas cálidos de la personalidad de Nacho Cano, de 33 años, y habla de su descubrimiento del universo de la mujer.Pregunta. ¿A qué experiencia se refiere el título del álbum El lado femenino?
Respuesta. Yo cuando empiezo un trabajo necesito tener un concepto, una dirección. A veces es concreta y otras ambigua. En el anterior disco, Un mundo separado por el mismo Dios, el mensaje era universalista, claramente social, pero no hablaba de mi problema, de mi vida. Ese disco estaba muy basado en el recurso sonoro y en él ya dije todo lo que había que decir sobre el mundo. En este nuevo mi situación vital, las cosas que había vivido, me han llevado a meterme mucho en el mundo de la mujer. Antes para mí la mujer estaba ahí, pero no profundizaba demasiado en ello. Ahora he intentado comprenderla, escucharla, y he descubierto muchas cosas.
P. ¿Qué cosas?
R. Por ejemplo, lo que piensan las mujeres de las relaciones. Aunque cada una tiene sus matices, en general tienen ciertos puntos en común. La mujer busca un hombre. Su primer valor no es la belleza física. Eso es algo que incluso le puede molestar. Busca una belleza completa. La mujer asocia la excesiva belleza masculina con la tontería.
P. Los hombres también.
R. Pero a los hombres les gusta. Si la tía está buena y encima es un poco tonta, no dará problemas. El esquema de la mujer es muy distinto. Hay un énfasis grande en la seguridad que le dé el hombre, el material, y buscan una relación para toda la vida. El tema Vivimos siempre juntos habla de eso tal como yo lo he percibido.
P. Las canciones de este disco no tienen ningún tinte dramático. Todo parece bastante dulce y cálido.
R. Es que mi sentimiento de las relaciones es dulce. Yo no inicio una relación que se vea venir conflictiva. Antes sí, hasta me daba morbete. Mis canciones no van por ahí, porque eso es algo muy primario.
P. En el disco incorpora, además de la colaboración de Mercedes Ferrer, voces de mujeres prácticamente desconocidas. ¿Quiénes son?
R. Antes que el tirón comercial, me interesaba la credibilidad del trabajo. Por eso prefería voces buenas sin ser famosas. Mercedes Ferrer es la más conocida, aunque no tanto como podría ser una Caballé, por ejemplo. Las otras seis cantantes provienen de un casting y grabamos con ellas como solistas y como coros.
P. ¿Y no se lo ofreció a Ana Torroja?
R. Pues, sí. Le ofrecí a ella cantar La fuente del amor. Pero las cosas no son tan naturales y frescas como uno quisiera, porque yo estoy en una compañía discográfica distinta, ella sigue con la de Mecano, va a sacar su primer disco en solitario... Ha preferido guardarse para ese trabajo.
P. En estos días Héroes del Silencio han anunciado su separación. Parece que está terminando la era de los grandes grupos del pop español, ¿es por el conflicto de la convivencia artística o porque es el fin de una época?
R. Los grupos acaban por dos cosas: o que has ganado tanto que ya hasta tus bisnietos van vivir de ello, como los Beatles, que el público te retira. En la mayoría de los casos los grupos que han desaparecido en España lo han hecho porque el público no ha seguido con ellos. El último de la Fila sigue ahí. En nuestro caso, Mecano se retiró en el mejor momento de su carrera. La gente aun hoy sigue queriendo un disco de Mecano. Y paramos por cansancio, de todos, pero en particular de Ana. Habían sido trece años seguidos, sin parar, y ya no podíamos más. Pero influyen otras cosas además, como la edad, las ganas de vivir tu propia vida. Nosotros creamos eso, pero Mecano era un monstruo que nos devoraba. Si no estuviera el público allí, sí que podríamos hablar de una separación definitiva de Mecano.
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