El italiano Gianandrea Noseda gana el concurso internacional de directores de orquesta de Cadaqúes
El director italiano Gianandrea Noseda fue el ganador del II-Concurso Internacional de Directores de Orquesta de Cadaqués. El premio está dotado con 500.000 pesetas y contratos para dirigir en la próxima temporada a 15 orquestas españolas, entre ellas la propia Orquesta de Cadaqués, la Orquesta Ciutat de Barcelona, la Joven Orquesta Nacional de España y la Orquesta Sinfónica de Tenerife.Gianandrea Noseda, alumno del Conservatorio Giuseppe Verdi de Milán y la Academia Chigiana de Siena, fundador de la orquesta Il Collegio del Musici, ganó este mismo año el primer premio de dirección de orquesta en el VIII Concours International de Jeunes Concertistes de Douai (Francia).
El concurso, que inicialmente recibió 70 solicitudes, seleccionó a 20 candidatos, cuatro de ellos españoles. La primera eliminatoria redujo los aspirantes a siete y tras la segunda eliminatoria el jurado eligió a dos finalistas: el inglés Christopher Gayford y el italiano Gianandrea Noseda.
En la final, Gayford, que actuó en primer lugar, y Noseda se pusieron al frente de la Orquesta de Cadaqués para dirigir el primer movimiento del Concierto para violonchelo en la menor, op. 129 de Schumann, con la participación de Alvaro P. Fernández como solista y el último movimiento de la Sinfonía núm. 7 en La mayor, op. 92 de Beethoven. Inicialmente, estaba previsto que en la final tuviera lugar el estreno mundial de la obra Daliniana compuesta por Cristóbal Halffter para la ocasión pero la complejidad de la partitura y el breve tiempo de que dispusieron directores y orquesta para prepararla obligaron a que el estreno fuera sólo parcial. Gayford dirigió Rellotges tous, la primera parte de Daliníana, Noseda dirigió la segunda parte, El somni y quedó pendiente de estreno la tercera y última parte de la obra, El naixement de l'angoixa líquida. El jurado, integrado por Alfonso Aijón, Leo Brouwer, Gabriel Chmura, Cristóbal Halffter y Antoni Ros Marbá, estuvo presidido por Gennady Rozhdestvensky, director principal de la Orquesta Filarmónica de Estocolmo.
