La Eurocámara bloqueará la ampliación de la Unión Europea si no se reforman las instituciones
El Parlamento Europeo (PE) tomó ayer el protagonismo en las negociaciones de ampliación de la Unión Europe ' a (UE). La Eurocámara se alineó con las tesis de los grandes países en el espinoso asunto de la reforma institucional al exigir que tanto en las votaciones del Consejo de Ministros como en la formación de la troika que representa semestral mente a la Comunidad se tenga en cuenta el factor población. La presidencia belga reiteró su pro pósito de dar prioridad al proceso de adhesión en perjuicio de la reforma institucional.La resolución impulsada ayer por el PE, consensuada entre socialistas y conservadores -mayoritarios en la Eurocámara-, tiene especial relevancia si se tiene en cuenta que, en contra de lo habitual, sí puede llegar a ser vinculante. El PE ha de dar su aprobación a la adhesión de nuevos países, por lo que el proceso de integración de Austria, Finlandia, Suecia y Noruega puede topar con el obstáculo de la reforma institucional si el Parlamento insiste en el futuro en mantener las exigencias planteadas ayer.
El ministro belga de Exteriores y presidente semestral de la UE, Willy Claes, encajó mal el rapapolvo parlamentario. Advirtió a los eurodiputados que la resolución significaba en la práctica elegir entre la ampliación y la reforma institucional y se inclinó por la primera opción porque la presidencia quiere cumplir su misión". Claes advirtió también que "respetando esta resolución, vamos a evitar a toda costa una confrontación entre los llamados países grandes y pequeños, y no estoy seguro de que sus soluciones [las del Parlamento] la eviten".
En síntesis, la resolución debatida en el pleno de ayer en Estrasburgo sostiene que "cualquier ampliación debe ir acompañada de las transformaciones institucionales necesarias para el buen funcionamiento de la Unión, transformaciones que han de integrarse en los tratados de adhesión". Para facilitar esta reforma propone que las tres instituciones comunitarias -Parlamento, Consejo y Comisión- puedan designar un comité de sabios que les asista en su trabajo.
La resolución propone mejorar el sistema de mayoría cualificada y ofrece como alternativa "un sistema de votación fundado en una mayoría de los Estados y en una mayoría de la población". De esta forma, los parlamentarios intentan evitar que un grupo mayoritario de Estados con poca población, apenas el 12% de la Unión, puedan bloquear las votaciones por mayoría cualificada.
Respecto a la representación de la Comunidad a través de la troika semestral propone un sistema de rotación automática "garantizando el acceso de cada miembro a la presidencia y, al mismo tiempo, troikas equilibradas que comprendan, cada una de ellas, por lo menos uno de los cinco Estados miembros más poblados". En la actualidad, la representación comunitaria la encabeza el país que ocupa la presidencia, junto al que le precedió y al que le seguirá, cuyos turnos se establecen por orden alfabético. Sobre la ampliación de la Comisión asignándole una cartera a cada nuevo Estado miembro, se inclina por la fórmula de que haya "al menos un nacional de cada uno de los Estados miembros, sin que el número de miembros en posesión de la nacionalidad de un mismo Estado pueda ser superior a dos".
Varios diputados de países pequeños se opusieron a esta resolución por entender que dificulta la ampliación y prima a los países grandes.
