Los Dire Straits inician una gira y lanzan su esperado nuevo disco 'On every street'

El grupo británico Dire Straits regresa al mundo del espectáculo, después de un silencio de seis años, con uno de los elepés más esperados de la década: On every street. El disco, octavo de su carrera, se pondrá a la venta en España el próximo 9 de septiembre. La gira para presentar en directo este trabajo comienza esta noche en Dublín y tendrá escala en España, en fechas aún sin confirmar de mayo de 1992, finalizará en 1993, después de 300 conciertos. Más de siete millones de personas verán en vivo a la banda de Mark Knopfler.

El guitarrista y compositor Mark Knopfler es un hombre tranquilo. Abrumado por el éxito de Dire Straits en la pasada década, no dudó en disolver la banda y dedicarse a actividades minoritarias (colabora con el grupo Notting Hillbillys y con el guitarrista Chet Atkins, y graba algunas bandas sonoras). A sus 42 años, este licenciado en Literatura Inglesa busca "el placer de la música", y se niega en redondo a formar parte activa "en un negocio, el del pop, que te puede llegar a chupar hasta la última gota de sangre". Natural de Glasgow, confía en la pureza de las cosas sencillas", y apuesta en su nueva etapa por "la difícil tarea de transmitir sentimientos profundos a públicos mayoritarios"."El único secreto para hacer un buen disco es tener buenos temas", respondió a EL PAÍS cuando se le preguntó por su nuevo elepé. "Una canción es como un motor: si está bien engrasado, si funciona bien, todo lo demás se mueve por inercia; entonces todos los aspectos que rodean a una banda de rock son mucho más sencillos", continúa diciendo. "Un disco es una colección de canciones, y una canción es una reunión de sentimientos. La teoría no parece complicada".

Desde la edición del primer disco del grupo, en marzo de 1978, los éxitos han acompañado invariablemente a Dire Straits. Canciones como Sultans of swing, Lady writer, Tunnel of love, Sofar away y Money for nothing se han convertido en auténticos clásicos, "seguramente porque no fueron concebidos con tal intención". Su anterior elepé, Brothers in armas, superó los 20 millones de copias vendidas. Sin levantar jamás la voz, Knopfler muestra especial interés en dejar claro que no trabaja para alcanzar puestos de honor en las listas de ventas: "Entrar en esa mecánica es aceptar el principio del fin". Como guitarrista ha creado un estilo propio. Como compositor sólo desea sentir que es "capaz de mejorar cada día. Cuanto más tiempo paso con mi guitarra, escribiendo y tocando, más convencido estoy de que me queda muchísimo por aprender. Y eso es maravilloso... ".

Raíces

El primer sencillo extraído del nuevo álbum de Dire Straits se llama Calling Elvis, "seguramente porque todo el mundo vuelve a sus raíces tarde o temprano". "Es imprescindible mirar hacia atrás en algún momento de tu vida", continúa diciendo, en un tono de voz alicaído carente de toda rítmica, "para poder situarte y encauzar correctamente el futuro. Si no sabes de dónde vienes, nunca podrás llegar a ningún sitio... Con la música pasa igual: lo principal es simplificar, tener como biblia las cuatro normas que aprendiste de pequeño y que te sirvieron para escribir tu primera canción". Knopfler asegura aplicar esta regla "en todos los aspectos de la vida".Después de escribir la banda sonora de películas como The color of the money (El color del dinero, de Martin Scorsese) o The Prince Bride (de Rob Reíner), Knopfler asume su papel de líder de un supergrupo. "Sé que cuando el grupo se lanza a la carretera se convierte en un monstruo de proporciones increíbles", dice, "y tengo muy claro que alguien tiene que tenerlo bajo control". Su esperada nueva gira, que comienza hoy en Dublín, realizará escala en España, en fechas aún no confirmadas de mayo del 92. Europa del Este y Oriente Próximo están incluidos en esta mastodóntica gira programada hasta 1993.

Enemigo de las brusquedades, sólo se siente cómodo de verdad "trazando melodías suaves". "Puedo hacer temas fuertes", continúa, "y de hecho, en este ultimo álbum hay momentos de tensión, pero para encontrar el feeling necesito tranquilidad". Para compensar esta reconocida blandenguería, Knopfler se apoya en músicos versátiles, capaces de trazar ritmos paralelos. En la gira nueve músicos forman Dire Straits: Mark Knopfler (voz solista y guitarra), John Illsley (bajo y coros), Guy Fletcher (teclados), Alan Clark (teclados), Paul Franklin (dobro y guitarra de pedal), Phil Palmer (guitarra), Chris White (saxo y flauta), Danny Cummings (percusiones) y Chris Whitten (batería).