La duquesa de Medina Sidonia cede su archivo a la Universidad Complutense

La duquesa de Medina Sidonia, Luisa Isabel Álvarez de Toledo, firmó ayer el protocolo de cesión de su palacio de Sanlúcar de Barrameda (Cádiz), que contiene uno de los archivos privados más importantes de España, a la Universidad Complutense de Madrid, así como la propuesta para crear la Fundación Complutense-Casa Medina Sidonia, que albergaría un gran centro de investigación.

La Junta de Andalucía "no está dispuesta a ceder ningún bien cultural de la comunidad autónoma", según declaró ayer un portavoz.La duquesa, quien días atrás amenazó con llevar su archivo al extranjero, declaró: "Nos quedamos todos en Sanlúcar y los documentos estarán a salvo de personas sin sensibilidad que están destruyendo mi palacio".

La duquesa de Medina Sidonia ha mantenido en las últimas semanas un fuerte enfrentamiento con el Ayuntamiento de Sanlúcar por unas obras que, según ella, ponen en peligro la integridad de su palacio, cuyas primeras piedras fueron colocadas en el siglo XII. Luisa Isabel Álvarez de Toledo culpa al alcalde de la localidad, el socialista Manuel Vital Gordillo, del deterioro de su palacio, mientras que el edil acusa a la duquesa de intentar vender el edifico y el archivo y marcharse.

Sensibilidad de Villapalos

La polémica se agravó el martes pasado, cuando el delegado de Cultura de Sánlucar, Carlos Lucas, lanzó un ultimátum a la duquesa: "O vende el palacio o lo expropiamos". Álvarez de Toledo reaccionó al aviso de una forma tajante: "Este chantaje me hizo llamar esa misma mañana al rector de la Universidad Complutense, Gustavo Villapalos, una persona de sensibilidad, que por la noche ya estaba aquí".Según el protocolo del acuerdo -firmado en la mañana de ayer en Sanlúcar, ante notario, por Villapalos y Álvarez de Toledo-, la universidad Complutense contribuirá económicamente al mantenimiento del palacio y dotará con una plantilla de historiadores las dependencias del archivo, compuesto por unos cuatro millones de documentos referidos a la historia de España y Portugal. Por su parte, la fundación dará cabida a un gran centro de investigación, en el que se organizarían seminarios y conferencias.

Villapalos manifestó ayer desde la residencia ducal que su intención es dar continuidad al archivo, que, según el rector madrileño, se mantiene en condiciones "perfectas gracias a los cuidados de la duquesa". Villapalos indicó que aún es pronto para hablar de dinero o de convenios concretos respecto a la forma de intervención de la universidad, y aplazó para el mes próximo la constitución formal de la fundación.

En opinión del rector de la Complutense, la duquesa, como presidenta de la fundación, sólo tiene obligación de dirigirse a la Junta para dar cuenta de la operación, pero no hay ningún impedimento legal para que el archivo pase a manos de la Universidad madrileña.

Un portavoz de la Junta indicó ayer que la Administración autonómica "no está dispuesta a ceder ningún bien cultural de la comunidad autónoma", y añadió que en los próximos días "habrá más noticias". El Gobierno regional tiene todas las competencias legales en materia de cultura y sólo intervendría el Ministerio de Cultura si la comunidad hiciese dejación de sus facultades. Tanto el palacio como el archivo de la duquesa son bienes de interés cultural desde 1978, cuando el conjunto fue declarado monumento histórico-artístico.

Por otra parte, el concejal de Cultura de Sanlúcar, Carlos Lucas, presentó ayer una querella contra la duquesa por injurias. Según Lucas, la aristócrata declaró que el delegado municipal pensaba tirar su palacio para construir unas viviendas "con unos amiguetes". Lucas añadió que la duquesa recibió este verano una oferta privada de compra por valor de 3.000 millones de pesetas.