Aumenta el número de deserciones en el cuerpo diplomático
Siete miembros de la representación diplomática de Filipinas en Honolulu (Hawai), entre ellos el cónsul general, Raúl C. H. Rabe, manifestaron el sábado su apoyo a los militares sublevados contra el presidente Ferdinand Marcos y pidieron al dictador que dimita.
En un comunicado firmado por los siete diplomáticos, éstos consideran que Marcos está ocupando un puesto que "Iegítimamente no le corresponde", tras el fraude electoral de los pasados comicios. Los diplomáticos manifestaron que continuarán desarrollando sus funciones consulares "hasta que tome posesión el presidente legítimo y recibamos instrucciones".
En términos similares se expresó Leovigildo Anolin, cónsul general interino en Los Ángeles (California, EE UU). "[Marcos] debe dimitir ahora y someterse a las peticiones del ministro Juan Ponce Enrile y del general Fidel Ramos", declaró en un comunicado.
Por otra parte, el Gobierno australiano llamó ayer a consulta a su embajador en Manila, Roy Fernández, y ha recomendado a sus ciudadanos que no viajen a Filipinas debido a la actual situación del país.
Mientras tanto, los cinco países asociados con Filipinas en la Asociación de Naciones del Sureste Asiático (ASEAN) hicieron un llamamiento al Gobierno de Manila para que encuentre una solución a la crisis por la que atraviesa y evite el derramamiento de sangre.
