La primera antológica de Paul Cézanne en España se abre hoy en Madrid .
Incluye los períodos más significativos del artista
Una gigantesca fotografía con un retrato de Paul Cézanne (1839-1906) da la entrada a la primera exposición antológica de este artista francés que se celebra en España y que hoy se abre al público en el Museo Español de Arte Contemporáneo (MEAC), en Madrid. En ella se exhiben 80 trabajos, óleos y acuarelas, básicamente, cedidas por coleccionistas, particulares e instituciones extranjeras. El único material procedente de una entidad española son dos litografías cedidas por el Museo de Bellas Artes de Bilbao.
La exposición de Cézanne, presentada anoche de forma oficial por el ministro de Cultura, Javier Solana, permanecerá abierta hasta finales del mes de abril y es la primera gran muestra de principios de temporada de la política oficial de exposiciones.En las salas de la planta baja del MEAC, las ochenta piezas que integran la exposición componen, en opinión de la comisaria de esta muestra, Paloma Esteban, una clara y suficiente referencia de los cuatro períodos habituales en los que se suele dividir la producción. de Cézanne: romántico, impresionista, constructivo y de síntesis. Están también representados todos aquellos temas que el artista: trató de manera preferente: los jugadores de cartas (están dos de las cinco versiones que realizó sobre este asunto), retratos de su mujer y de su hijo Paul, autorretratos, sus famosas manzanas, bañistas... Son temas y etapas realizados también sobre los diferentes. soportes en torno a los que investigó: óleos, dibujos, aguafuertes, litografías y acuarelas.
El montaje realizado en el MEAC pretende seguir un orden cronológíco a partir de sus cuatro etapas creativas. Las obras han sido protegidas de las posibles agresiones de los visitantes por unas barras de acero que obligan a padecer la molestia de tener que observar las pinturas a una distancia de casi medio metro. Pero, al parecer, estas medidas de seguridad han sido exigidas por los coleccionistas y museos que han prestado su obra.
El presupuesto de la exposición ha sido de 65 millones de pesetas, y una gran parte de esa cantidad ha sido para las compañías aseguradoras, aunque se ha vedado la información sobre cantidades exactas percibidas por estas empresas.
El catálogo, que se vende a 1.500 pesetas el ejemplar, y del que se han tirado 10.000 volúmenes, ha sido realizado por la empresa IBM Española, que también se ha encargado de los carteles y publicidad en vallas callejeras. En el catálogo se incluyen reproducciones en color de todas las obras que se exhiben y en blanco y negro de aquellas que faltan en la exposición madrileña.
La mayor dificultad con que se ha encontrado la comisaria de la exposición para realizar su trabajo, en el que ha consumido un año, ha sido la dispersión de la obra del artista francés. Explica que cuando surgió el proyecto y se puso en contacto con Philippe Cézanne, descendiente del pintor, éste le advirtió que la familia sólo conservaba la última paleta utilizada por su antepasado. Sus obras habían sido vendidas a museos o coleccionistas particulares.
Antes de esta exposición presentada anoche y cuya inauguración oficial y para el público se celebrará hoy, Cézanne ha sido protagonista al menos de dos grandes muestras parciales de su obra. Una en el Museo de Arte Moderno de Nueva York, en 1977, organizada por el crítico John Rewald, y en ella sólo se recopilaron obras del periodo de síntesis de Cézanne. La misma etapa fue el motivo de otra exposición organizada en Japón en 1974.
La opinión generalizada de los organizadores y apoyos oficiales de esta muestra española (Ministerio de Cultura, IBM, Banco de Bilbao y Air France) es que el resultado del trabajo supone una iniciativa de especial interés porque la obra de Cézanne, máximo inspirador de los movimientos vanguardistas contemporáneos, no había podido ser apreciada. hasta ahora por el público español.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.