María Zambrano recogerá en Oviedo el título de hija adoptiva de Asturias
María Zambrano expresó su sincera intención de viajar a Oviedo para recibir el título de hija adoptiva de Asturias, que le concederá la comunidad autónoma, aunque no se ha comprometido a dar la aceptación incondicional a una fecha concreta. Anteriormente, estuvo a punto de trasladarse a Asturias para formar parte del jurado que concedió el premio Príncipe de Asturias de Comunicación Social y Humanidades, 1982, pero, al final, hubo de desistir por no encontrarse en condiciones de viajar. También está invitada a asistir en octubre a la entrega de los premios Príncipe de Asturias.Antonio Masíp, consejero de Cultura, y Jesús Arango, consejero de Agricultura de Asturias, visitaron a María Zambrano en Ginebra para exponerle el proyecto del Principado de nombrarla hija adoptiva en el mismo acto en el que Pedro Caravia será nombrado hijo predilecto.
Zambrano, exiliada en Ginebra desde la guerra civil, tenía sobre su mesa el libro-homenaje de la Caja de Ahorros de Asturias a Pedro Caravia, su mejor amigo mientras ambos estudiaban en la facultad de Filosofía de la Universidad de Madrid. En la conversación mantenida con los consejeros socialistas, María Zambrano recordó, con emoción, a Vélez-Málaga, su tierra natal, y, también a Asturias, donde se le otorgó el premio de la Fundación del Principado de Comunicación Social y Humanidades, 1981; les comentó que había hablado en público, por primera vez, en un ciclo de conferencias, celebrado en Gijón, en 1935, después de haber solicitado permiso para ello a José Ortega y Gasset y les pidió que le enviaran muestras de la espléndida cerámica asturiana de Faro y Llamas de Mouro.
