La Transición y sus relatos
La legalización del Partido Comunista no sucedió como comunmente se ha aceptado
La legalización del Partido Comunista no sucedió como comunmente se ha aceptado
Es la parte del mercado la que parece haber acabado ganando, en el doble juego de la modernización, a la parte de los principios democráticos. Aunque China lleva décadas modernizándose a ritmos de infarto, la democratización ni está ni parece que se la espere
Elegir por sorteo a los 20 vocales del gobierno de los jueces solucionaría un problema político que no hace más que desprestigiar a nuestra democracia
El reverendo negro asesinado hace 50 años nos legó una terapia eficaz contra lo injusto
Quizás la salida consista hoy y ahora en avanzar hacia una desnacionalización de la idea de Estado que permita trasladar la cuestión sobre lo que es la nación a las creencias particulares de cada uno
Que “la muerte de mi hijo sirva para algo”, dijo el padre de Xavi tras el abrazo. Para muchos su gesto nos sirve
Aunque los individuos tienen responsabilidad moral, los partidos no responden a ese criterio. Para combatir la corrupción es necesario que las organizaciónes políticas tengan que rendir cuentas a más controles externos
¿Por qué razón los grandes partidos no han movido jamás un dedo para modificar una ley electoral que otorga a los ciudadanos españoles un voto desigual?
Los políticos solo dimiten cuando es su propio partido el que los obliga a hacerlo
La división que crean entre "gente" y "casta" no basta para justificar la acusación
Hay muchos mimbres podridos en la democracia española. No es que los alemanes o los nórdicos no puedan ser pícaros, es que gozan de instituciones bien diseñadas que no dejan espacio a la posibilidad de picaresca
Hay manipulaciones hechas a plena luz que no vemos por falta de ilustración
Los partidos han desarrollado evidentes problemas de higiene democrática, pero hay pocos recambios al sistema. Lo que se necesita es que compitan en pie de igualdad y los escaños sean proporcionales a los votos
No se puede aplicar a Cataluña el discurso antinacionalista de la lucha contra ETA
En España militar es callar y solo el electorado acabará con el bipartidismo
Necesitamos sentir que la Constitución es nuestra, que nosotros somos sus dueños. No debe ser un instrumento jurídico frente al nacionalismo, sino la casa común de todas las sensibilidades democráticas
En España no hay libre competencia entre las formaciones políticas como la hay en Alemania, donde la corrupción se depura a nivel interno para evitar la fuga de votos, lo que el sistema hispano hace casi imposible
Los asientos vacíos en el Parlamento podrían servir para recordar el descontento de muchos ciudadanos
En el sistema electoral español no todas las papeletas valen lo mismo: las del PP y el PSOE valen mucho más que las de IU y UPyD. Tenemos un problema: la igualdad de voto es un requisito básico de la democracia
Detrás de Holden Caulfield y de sus andanzas por Nueva York hay algo que va más allá de la literatura. La emoción que provoca el personaje de J. D. Salinger, que murió hace unos días, poco tiene que ver con la moral
El laicismo es el gran invento de la modernidad para facilitar la convivencia entre los diferentes credos: saca a Dios del salón público y lo instala en el corazón privado de los hombres y de las mujeres libres
Cuestionaron en la España de los años setenta el servicio militar obligatorio con propuestas no violentas. Su recuerdo es oportuno en un país con tantos adolescentes sin ideales y tantos políticos sin generosidad
En la polémica sobre el crucifijo en las escuelas algunos olvidan lo esencial: un Estado de derecho que se precie ha de ser neutral en lo tocante a creencias religiosas. O se inhibe o da a todos en proporción a su peso
La realidad política de esta comunidad uniprovincial es tremendamente compleja, y no sirven para interpretarla ni el modelo vasco ni el modelo español. La crisis UPN-PP debe entenderse en ese contexto
Nuestro sistema es desproporcional, impone el bipartidismo, fomenta la polarización y hace casi imposible que surja un tercer partido moderador. Los nacionalistas quedan como única alternativa para pactar