Arte, cursilería... y Pieter Brueghel el Joven en la televisión holandesa

Entre el arte y la cursilería (Tussen kunst & kitsch) es el título de una serie de la televisión holandesa dedicada a presentar las antigüedades guardadas en los desvanes por el público. Se trata de una emisión muy popular, pues permite husmear sin disimulo en los recuerdos de los demás. Y acaba de apuntarse "el descubrimiento del siglo". Al menos eso ha asegurado su experto en arte antiguo, John Hoogsteder, después de comprobar que un cuadrito redondo de apenas 17 centímetros, traído por una espectadora, era una obra del pintor flamenco Pieter Brueghel el Joven.

Fechada en 1620, se trata de una tabla al óleo con una pareja de campesinos descansando sentados bajo un árbol después de la siega. "Es del artista por la forma en que la pintura sobresale al haberse contraído la madera con los años", dice el estudioso, quien asegura que esa característica era propia de los trabajos del maestro renacentista.

El detalle de la firma tampoco es desdeñable. A pesar de aparecer escrita de arriba abajo en el tronco del árbol que protege al labrador y su esposa, no llamó la atención del anticuario que la vendió a la actual dueña. Una suerte, porque los 100 florines pagados (45 euros) en 1950 se han transformado ahora en cerca de 100.000 euros. El hallazgo del cuadro sólo podrá verse en la nueva temporada de la serie, prevista para marzo, pero ha servido para recuperar la figura de Pieter Brueghel el Joven (1564-1638). Hijo, hermano y padre de artistas, recibió el apodo de Brueghel el infierno por su afición a las visiones y el fuego que plasmaba al óleo. Pintor asimismo de temas costumbristas, heredó junto a su hermano, Jan, la obra y proyectos de su padre, Pieter Brueghel el Viejo. Convertidos los hijos en formidables copistas de la obra paterna, las escenas de comidas, paisajes nevados o bailes populares que salían de su taller se hicieron populares en las ciudades flamencas del siglo XVII.

Para la cadena televisiva AVRO, la publicidad ha sido muy bienvenida. El programa de televisión Entre el arte y la cursilería suele superar el millón de espectadores de audiencia y la nueva temporada se espera aún mejor. La propietaria de la pieza, sin embargo, parecía tener sentimientos encontrados, según los responsables del programa. "Nos dijo que era el mejor fondo de pensiones que podía imaginar, aunque no lo necesitara de momento. Al mismo tiempo, parecía turbada por el elevado precio súbito de una miniatura comprada cuando se casó", han comentado los expertos del programa.Se calcula que la tabla al óleo podría valer en el mercado unos 100.000 euros