Brasil comienza a cerrar X en medio de las amenazas de Elon Musk

El magnate norteamericano y dueño de la plataforma social X, Elon Musk, se ha revuelto este sábado contra la decisión del juez brasileño Alexandre de Moraes de suspender la red ante el “reiterado incumplimiento de órdenes judiciales”. El regulador de telecomunicaciones de Brasil, Anatel, ha requerido a los proveedores de servicios de Internet que suspendan el acceso de los usuarios y, a partir de la pasada medianoche, los principales operadores han comenzado a hacerlo. La reacción se produce después de que el empresario norteamericano se haya negado a bloquear seis perfiles de usuarios de la órbita del bolsonarismo con el argumento de que el juez es “un dictador” que pretende censurarlos. Esta mañana ha amenazado con comenzar mañana a publicar “una larga lista de crímenes” del juez, al que acusa de incumplir las leyes de su país con su dictamen.

El juez más famoso y poderoso de Brasil, Alexandre de Moraes, símbolo de la defensa de la democracia y cruzado contra la desinformación, ordenó el viernes (medianoche en España) que la actividad de la popular red social sea inmediatamente suspendida ante el “reiterado incumplimiento de órdenes judiciales”, según el dictamen legal. La contundente medida del magistrado del Tribunal Supremo supone la culminación del pulso público y legal que mantiene desde hace meses con Elon Musk por negarse a bloquear seis perfiles de usuarios de la órbita del bolsonarismo con el argumento de que el juez es “un dictador” que pretende censurarlos con la vista puesta en las elecciones municipales brasileñas, previstas para el mes de octubre.

Mientras De Moraes sostiene que ordena el cierre porque existe “un riesgo inminente” de que “grupos extremistas y milicias digitales prosigan y amplíen la instrumentalización de X Brasil con la divulgación masiva de discursos nazis, racistas, fascistas, de odio y antidemocráticos”, Musk acusa al juez de quebrantar las leyes brasileñas. El magnate ha asegurado que comenzará a publicar, a partir de este domingo, la “larga lista de crímenes” cometida por el magistrado, acompañada de una enumeración de “las leyes brasileñas que ha roto” con su dictamen.

“Está claro que no tiene por qué cumplir las leyes de Estados Unidos, pero debe cumplir las de su propio país”, ha declarado Musk en su cuenta de la red social de la que es propietario y donde ha acusado al magistrado de ser “un dictador y un fraude”.

“El pueblo de Brasil conocerá sus crímenes. No importa cuánto se esfuerce en impedirlo”, ha añadido el magnate, quien califica X como “la fuente de noticias más usada en Brasil y la que quiere la gente”.

El magnate anunció hace casi dos semanas el cierre “inmediato” de la filial de la empresa en Brasil con motivo de las “órdenes de censura” de De Moraes, a quien denominó “una desgracia para la Justicia” brasileña.

El juez, por su parte, justifica la decisión de bloquear X en que ciertas cuentas de “milicias digitales” investigadas en que difunden noticias falsas. Ya lo intentó durante el Gobierno de Jair Bolsonaro (2019-2022), pero estas órdenes no se cumplieron. Musk está siendo investigado por la presunta comisión de los delitos de obstrucción a la justicia, organización criminal e incitación al crimen, según reza un comunicado.

El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, ha defendido que todas las empresas que operan en el país deben cumplir con sus obligaciones legales. “El hecho de que un hombre tenga mucho dinero no significa que pueda faltarle el respeto (a la ley)”, dijo el líder izquierdista a la radio local el viernes. Musk se burló del presidente como el “perro faldero” de Moraes en una publicación del jueves en la que también llamó al juez un “dictador”. En un evento el viernes, Moraes no mostró signos de retroceder. “Aquellos que violan la democracia, que violan los derechos humanos fundamentales, ya sea en persona o a través de las redes sociales, deben rendir cuentas”, dijo.

Puedes seguir a EL PAÍS Tecnología en Facebook y X o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal.