“Con el chico más guapo, venga”. ‘Ganas’, la canción de Ayuso, mete a TikTok en el baile de la política española

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“Claro que sí, con el chico más guapo, venga”, respondió la presidenta Isabel Díaz Ayuso. El tiktoker Mario Agui le había pedido grabar un vídeo para colgar en redes bailando su nueva canción electoral, Ganas. Y la presidenta de la Comunidad de Madrid aceptó enseguida. Mario Agui, de Madrid y de 20 años, es becario en una productora y coincidió con Ayuso la semana pasada en una entrevista que hizo ella en la Puerta del Sol para el medio esDiario. Él colocó el móvil apoyado en un botellín de agua sobre la mesa y Ayuso le dijo: “Ah, ya te la sabes”. Puso la canción, miró a la política, bailaron ligeramente unos segundos y ya tenían el vídeo electoral ideal para 2023.

“En ese momento, no había visto vídeos con la canción”, dice Mario Agui, que tenía “200 y pico seguidores” en TikTok. “Lo subí por las coñas, pero ya lleva tres millones de visualizaciones. He salido en periódicos… se ha ido un poco de las manos”, añade Agui. Ahora tiene 5.500 seguidores, y es posible que su clip promoviera el furor por esa melodía: se han creado más de 11.000 vídeos, y entre todos tienen varias decenas de millones de visualizaciones. ¿Quién ha sido el creador de esa exitosa canción? Es otro misterio: “Ha sido un trabajo del gabinete de la presidenta”, dicen fuentes del PP de Madrid.

No todos los vídeos grabados con ese audio son a favor, o en contra, del PP y su presidenta. Muchos ni siquiera son sobre política. EL PAÍS ha hablado con un puñado de tiktokers que lo han usado sin ninguna connotación política, más allá de bromear sobre “ganas” de exámenes o vacaciones, incluso sin saber su origen político. En TikTok, cuando un audio se convierte en tendencia, hacer un vídeo con él ayuda a viralizarlo. Es razón suficiente para contribuir.

Mario Agui dice que no ha cobrado nada por el vídeo: “No he visto ni un duro, pero sí me favorece. Tenía planteado hacerme un blanqueamiento de dientes y ahora me saldrá gratis porque una empresa quiere hacer una colaboración. Dinero en metálico no, pero sí a través de otras cosas”, dice. También pueden salirle nuevos trabajos, incluso de otros políticos: “La semana que viene igual tengo que ir a grabar con otro presidente. Esta vez me han llamado para hacerlo. Me han dicho que no puedo decir nada, pero es cercano”, dice. Si cuaja, será un político madrileño, pero que se presenta a otra elección.

Los trucos con el audio

TikTok no permite anuncios de cuentas políticas. Fuentes de la plataforma explican que mientras no haya pagos, el discurso político entra dentro de la libertad de expresión. Aunque si hubiera acuerdos privados entre influencers y partidos, la plataforma no se siente responsable. En el PP madrileño dicen que nadie ha pagado a influencers para viralizar la canción. En conversaciones de este periódico con varias agencias, nadie reconoce haber cobrado.

El éxito tiene algo de inexplicable, como la mayoría de los virales. “No hay explicación”, dice Mario Agui. “La única que se me ocurre para mi vídeo es que hice el paripé con ella. Fue surrealista. Lo grabamos y se fue. Luego el partido escribió a mi empresa diciendo que les había hecho mucha gracia, que se lo pasase sin editar, que lo querían para ellos”, afirma el tiktoker.

Aitana Soriano, una estrella en Tiktok con 872.000 seguidores, ya había subido el meme por primera vez desde el aeropuerto de Dallas, camino del festival de Coachella: “Es que vaya pedazo de meme, jajaja”, escribió en el pie del vídeo. Soriano colgó el vídeo el 21 de abril, en precampaña. Tomó el audio no de la cuenta oficial del PP, sino de otra aparentemente vinculada pero sin el logo del partido: de nombre María, con 1.300 seguidores y lleno de vídeos a favor de Ayuso. Ese truco anterior a la campaña pudo permitir al PP viralizar un eslogan antes del periodo legal, para que estallara ahora, justo a tiempo para las elecciones. Solo con el audio subido por la cuenta secundaria de María se han grabado 6.000 vídeos.

“Nuestra versión fue ‘ganas de salir de Dallas’”, dice Alba Rodilla, representante de Soriano. “Después, Aitana ha hecho bastantes más tiktoks con ese audio, que han sido muy virales. También la han criticado al dar por hecho que es de derechas sin conocerla, pero es algo que se toma con humor y a lo que no da importancia. Al final, es un meme como cualquier otro que resuena mucho en TikTok”, dice.

Algo parecido pasó con Nuria Pajares, que vive en Salou (Tarragona), y tiene 2,4 millones de seguidores: “Pensé que no se habían fijado de dónde sale el audio, son influencers catalanas y aunque Ayuso tenga impacto nacional, no es lo mismo. Pero fui a preguntárselo”, dice Myriam Pascual, representante de Pajares. “Me ha contado que fue por el cumpleaños de su hija y por las ‘ganas’, pero que vio el audio que era del PP y le hizo mucha gracia porque su padre se llama ‘Pepe’ y que siempre están con lo de ‘Pepe Pajares’. Le hizo gracia y quiso darle ese bombo”, añade.

Qué significa todo esto para el baile político

En comunicación política tradicional, este despliegue sería un éxito completo: “Primero, porque genera notoriedad. Mientras se habla de ti, no se habla del resto”, dice Xavier Peytibí, consultor de comunicación política en Ideograma. “Y segundo, porque llega a públicos no politizados. Especialmente jóvenes que saben ahora de esta música, sea por humor o no, pero el mensaje y la canción llega a mucha gente”. A pesar de estos éxitos, la traducción en votos no está garantizada: “No suele tener efecto electoral, especialmente porque los jóvenes suelen votar menos, pero sí puede generar un halo de simpatía”, añade.

Pero para comprender esta irrupción de TikTok en política, hay que ir más allá y entender cómo usan la plataforma los más jóvenes: “Esta generación se apropia de cosas de otros para emitir su mensaje”, dice Iago Moreno, sociólogo y especialista en estrategia digital. “¿Es esto una operación calculada del PP para usar los nuevos códigos? Probablemente nunca lo sabremos. Pero sí sabemos dos cosas: una, se repetirá más veces que haya mensajes que sean fácilmente replicables; y dos, el PP sí ha hecho una buena gestión de los recursos de TikTok. Cualquier audio sufre el mismo proceso que el de Ayuso. Su estrategia es para una generación acostumbrada a expresarse con muchas capas de ironía, donde ya no sabes si te apoyan o te critican o qué significa cada nuevo vídeo”, añade Moreno.

En las últimas generales brasileñas, Lula y Bolsonaro tenían canciones y bailes que los representaban. En TikTok se repetían. “Las canciones de campaña, aunque sean surrealistas y líricamente pobres, deben conseguir ser replicables en TikTok. La industria musical ya estructura sus obras en función de Spotify y las redes. Piensan en cómo traducir la fonomímica a TikTok”, dice Moreno. El chasquido de dedos del vídeo original sirve para ese objetivo. “Lo normal fuera de España es hacer playback de un discurso de un político para expresar apoyo o, si no, para criticarlo. Siempre decía que esto iba a llegar: Ayuso lo ha hecho por primera vez. En este país, los políticos son poco de bailar. Hasta hoy”, añade.

Es un fenómeno difícil de entender desde otras generaciones. No es difícil encontrar a creadoras que no sabían nada del origen de la canción: “Tengo que ser honesta, desconocía que el sonido era de un partido”, dice Carla Dimitrova, de @wellbeingcarla, con 270.000 seguidores. “Pensaba que eran los típicos audios que se hacen virales. Tan solo lo usé porque me parecía gracioso y había visto vídeos del estilo de lo que yo había subido, así que decidí subir uno también”.

La indiferencia por la faceta política es común entre los usuarios preguntados: “Lo he usado en tono humorístico”, dice Eben Villalba, tiktoker con más de medio millón de seguidores. “Opino como muchos de los usuarios que lo están utilizando. Le hemos dado un doble sentido, más allá de la campaña política a la que pertenece, por la palabra ‘Ganas’, que usamos para referirnos a cosas que queremos, pero nos parecen difíciles de alcanzar”, añade. “No creo que la gente que usamos este audio entendamos de política con exactitud”, explica Paula Correcher, “ni lo usemos para dar publicidad queriendo. Visibilizamos el audio de una manera cómica”.

No falta quien ve todo esto como un problema con el que no se debería jugar. El tiktoker Jorge García, con más de 73.000 seguidores en su cuenta @jota_studio, argumenta: “Entendí que gran parte de los usuarios que se reían del meme, era porque lo trataban como tal. Lo habían descontextualizado y en unas elecciones no votarían a este partido porque prefieren votar a quien los tenga en cuenta como personas. Pero mucha otra gente no solo no estaba enterada, sino que apoyaba fielmente al PP a pesar de no ser heterosexual. Incluso la propia Ayuso hizo un TikTok con un chico gay y afeminado usando el audio. Es algo que usaría para describir en imágenes el homonacionalismo. No me parece gracioso bromear con quien no me protege o no me respeta”.

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