Duelo de titanes en la cancha virtual
'FIFA' y 'PES' se citan un año más para comprobar cuál es el mejor juego de fútbol
Pocos momentos hay en el año más excitantes para el aficionado a los juegos de fútbol que la última semana de septiembre. Llega la hora de tomar una decisión crucial que marcará el resto de la temporada: FIFA o PES. Alrededor de un millón de personas compraron uno u otro en España, con una ligera ventaja a favor del primero. Sus últimas ediciones fueron el segundo y tercer título más vendidos, según datos de la Asociación de Distribuidores y Editores de Software de Entretenimiento (aDese).
Este curso la elección es más difícil que nunca, porque ambos ofrecen una experiencia muy gratificante. A FIFA le bastaba con no descarrilar pero PES necesitaba dar un salto de calidad mayúsculo para volver a competir en pie de igualdad. Parece que ambos lo han conseguido.
La joya de la corona de Electronic Arts conserva intactas las cualidades que lo convirtieron en el referente de los juegos de fútbol en 2007, y mejora sustancialmente todas las prometedoras novedades del pasado año. Es más una evolución que una revolución. "Nos dimos cuenta de que FIFA 12, pese a ser un gran título, era demasiado predecible. Nos pusimos la meta de crear un juego plagado de situaciones inesperadas, como ocurre en el fútbol real", explica Nick Channon, productor ejecutivo de las versiones de PS3 y 360 de FIFA.
En cambio, los japoneses de Konami se han visto obligados a prescindir de muchos aspectos de su anterior entrega para intentar recuperar la magia y el esplendor que tuvo la saga hace casi una década. "Hemos recibido estas semanas el feedback de decenas de miles de jugadores que han testado las versiones de prueba. Todos coinciden en que es la mejor versión desde los tiempos de la Playstation 2", defiende, orgulloso, John Murphy, responsable para Europa de Konami. Naoya Hatsumi, productor ejecutivo de PES y otro de los culpables de la drástica mejoría de la entrega, es contundente en su diagnóstico: “El rey ha vuelto”.
La realidad, al margen de declaraciones grandilocuentes, es que decantarse por uno u otro depende mucho del tipo de fútbol que a uno le guste. La opulencia de FIFA, un estudio con un presupuesto millonario y cientos de empleados, contrasta con el espíritu espartano y artesanal de la factoría japonesa. Y ese contraste se nota al coger el mando. FIFA es ante todo espectáculo y jugarlo es aceptar sus reglas. Sus partidos siempre destilan la atmósfera de las grandes noches.
FIFA 13 sale a la venta el 27 de septiembre. Electronic Arts ha mejorado la fluidez del juego y las animaciones de sus protagonistas, lo que acaba convirtiendo los partidos en un toma y daca constante en las dos porterías. Es un fútbol más orgánico que el de su rival, con un movimiento del balón muy natural, y es normal que los marcadores acaben siendo abultados. Es un homenaje, pletórico, al fútbol de ataque. Muchos aficionados, además, se rendirán ante su despliegue de equipos y licencias, con 30 ligas, 500 clubes y más de 15.000 jugadores. Un abrumador almanaque del fútbol moderno que mantiene intacta su vocación global tras seducir a millones de jugadores en los últimos cinco años. El objetivo de sus creadores es seguir construyendo una gran comunidad social alrededor del juego. Para ello cuentan con el modo Match Day, "que trasladará todo lo que ocurra cada domingo en las principales ligas europeas al juego", explica Channon. Así, "las lesiones, las tarjetas, y las rachas de aciertos de los jugadores tendrán reflejo en las partidas”, asegura este responsable.
Una de las quejas habituales sobre FIFA es que todos los equipos tienden a jugar de una manera muy similar. "Hemos trabajado duro para que ahora se note claramente la diferencia de estilos. Enfrentarse al Manchester United o al Barcelona, a los que les gusta controlar y mover mucho el balón, será muy diferente a medirse a equipos que juegan más al patadón. En ligas como la española o holandesa abundará el juego en corto mientras que en la Premier League habrá clubes mucho más agresivos y con un juego muy vertical" explica Channon. "Los jugadores controlados por la consola analizan mejor el espacio, hacen mejores demarques y crean ocasiones de gol que simplemente no eran posibles en FIFA 12", añade este desarrollador.
Estrellas con vida propia. PES, en cambio, atesora una visión más táctica del fútbol, donde se premia la construcción del juego y menos el momento del gol. Hay que pasar más tiempo fabricando que ejecutando. El juego, a la venta desde este viernes, se despoja de la mayoría de defectos que lastraron la anterior edición -comportamiento errático de porteros y defensas, ritmo de juego demasiado alto y disparos a puerta poco convincentes-, aunque sigue cojeando de unas animaciones algo bruscas y de un acabado gráfico un tanto caduco. "La inteligencia artificial de los equipos ha mejorado, los controles están refinados y la reacción de los porteros es más rápida", resume Murphy. Pero quizá el avance más significativo, y algo que en un futuro puede cambiar las tornas a su favor, es la impresionante reproducción del estilo de juego de los mejores futbolistas del planeta. Da escalofrío ver galopar, con su particular zancada, a Cristiano Ronaldo hacia el gol. O reconocer al instante los serpenteantes regates en el área de Messi. Ese tratamiento especial se ha aplicado a medio centenar de estrellas, pero Konami ha prometido inyectar ese plus de realismo a una nómina de más de 100 jugadores a lo largo de esta temporada.
Reproducción al detalle de 20 estadios. Quizá porque España es uno de los países donde más vende, PES ofrece la recreación más exhaustiva de la Liga que nunca se haya hecho en un videojuego, con la reproducción al detalle de los 20 estadios de Primera, los himnos de los equipos e incluso los cánticos más coreados en las gradas por cada afición. "En muy poco tiempo tendremos también la Segunda División", anuncia Hatsumi. Esta pasión por el detalle no se reproduce en las otras ligas, algunas de las cuales siguen sin estar licenciadas. El ejemplo más lacerante es la Liga inglesa, donde solo el Manchester United aparece puesto al día. "Hemos hecho grandes progresos en este aspecto", se justifica Murphy. "Algún día tendremos todas las ligas, pero un año más ofrecemos en exclusiva la Liga de Campeones y la Liga Europa. Además incorporamos la liga brasileña y mantenemos la Copa Libertadores que enfrenta a los mejores equipos latinoamericanos", detalla. Por otro lado, PES ha vuelto a emplearse a fondo para dotar de un parecido físico extraordinario a multitud de jugadores, aunque muchos de ellos pasarán desapercibidos para el aficionado español.
El órdago está echado. Aunque FIFA, hoy por hoy, es el líder indiscutible del mercado, PES se presenta este año con más opciones que nunca de arrebatarle el cotizado trono del fútbol virtual. Hatsumi lanza un vaticinio: "Algún día llegarán a su límite, así que tendremos que esperar para ver quién gana a quién". El japonés se refiere a Messi y Cristiano Ronaldo, que protagonizan respectivamente las portadas de ambos juegos. Pero sus palabras se pueden extrapolar a la legendaria rivalidad que alimentan cada año estos dos colosos del entretenimiento. Que gane el mejor.
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