BSA asegura que omitió la fecha de los registros en Workcenter porque "no es un dato importante"
La organización, dedicada a la persecución de la piratería informática, remitió una nota a ELPAIS.es exponiendo las razones por las que hizo público el comunicado sobre las redadas en Workcenter casi nueve meses después de que se produjeran
El pasado 28 de julio, la Business Software Alliance (BSA) emitió un comunicado en el que se decía que denunciaba un registro policial en varias sucursales que la compañía Workcenter Servicios Globales de Documentación S.A. tiene abiertos en España, por presuntos delitos contra la propiedad intelectual del software. En dicha nota, BSA no indicaba que los registros, consecuencia de una denuncia puesta por ellos, se habían producido el 4 de diciembre de 2002. Según el abogado de BSA, Oscar Deleito, la fecha del registro "no es un dato importante".
Un día después de que BSA hiciese pública la nota -29 de julio-, Alfonso de Senillosa, presidente y fundador de Workcenter, publicó una nota de prensa en la que denunciaba una extorsión encubierta por parte de la BSA, ya que aseguraba que "en el transcurso de los últimos ocho meses", representantes de la BSA habían tratado de llegar a un acuerdo económico. "A cambio de esto", decía la nota, "nos indicaron que no acudirían a la prensa".
ELPAIS.es intentó en ese momento sin éxito ponerse en contacto con la BSA para que explicase por qué emitió la nota de prensa casi nueve meses después de que se produjese el registro y por qué se omitió la fecha del mismo. La BSA se limitó a emitir un escueto comunicado en el que confirmaba "la autenticidad de los datos emitidos en la nota de prensa del 28 de julio".
Los motivos de BSA
BSA eludió contestar a las preguntas de este medio, pero el 1 de agosto, dos días después de que se publicara la información en la que el presidente de Workcenter acusaba de chantaje a la BSA, la unión de multinacionales remitió a ELPAIS.es una nota en la que exponía "los motivos de no haber emitido un comunicado en fechas más cercanas a aquellas en que se produjeron los registros".
La organización indicaba que "el procedimiento judicial contra Workcenter quedó sometido a secretos de actuaciones, hecho que motivó que el registro efectuado no pudiera ser divulgado en los días inmediatamente siguientes a su ejecución". Además, aseguraba que "durante el tiempo en que se han mantenido estos contactos, BSA ha respetado las peticiones de Workcenter de que no se divulgara noticia alguna en prensa".
El comunicado concluye asegurando que se terminó cualquier contacto extrajudicial con Workcenter y que publicó la nota de prensa sobre el registro porque la empresa de Senillosa no había acreditado ni judicial ni extrajudicialmente disponer de las licencias de los programas, "a pesar de haber dispuesto de más de nueve meses para hacerlo".
Por su parte, Oscar Deleito, abogado de BSA, aseguró que a pesar de que el secreto de sumario duró 45 días, no emitieron nota de prensa entonces porque no querían "perjudicar a Workcenter" y deseaban "que se respetara la presunción de inocencia".
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