Cuando un fantástico titular antecede a un riguroso trabajo de investigación social

Los científicos sociales aspiramos a aportar claridad a una realidad económica, social y política en acelerada transformación. Nuestra ambición máxima es contribuir a que el conocimiento que generamos con la investigación ayude a inspirar políticas públicas que den respuesta a los complejos retos que afronta la sociedad contemporánea.

Pocos investigadores logran alcanzar esa agenda máxima, pero en ese selecto grupo podemos destacar a Luis Moreno Fernández. Nuestro querido amigo y compañero Luis (Madrid, 72 años) falleció el pasado día 23 dejando tras de sí un legado que muchos quisiéramos atesorar.

Quizá debido a su formación y experiencia inicial como periodista y a su breve pero intenso desempeño político como concejal y diputado provincial en la transición, Luis poseía un sorprendente y fino olfato para identificar las tendencias de cambio social de las tres últimas décadas. Además, fue capaz de trasformar hábilmente sus intuiciones en fructíferas líneas de investigación y en conceptos ampliamente adoptados por las ciencias sociales, los medios y la ciudadanía.

Desde su tesis doctoral defendida en la Universidad de Edimburgo, en 1986, sobre las identidades nacionales en Cataluña y Escocia y los procesos de descentralización política de esos territorios, hasta sus recientes análisis sobre la robotización o el futuro del trabajo, Luis se encontraba siempre dos pasos por delante del resto de sus compañeros científicos en la identificación de las transformaciones sociales.

De toda su obra, la línea de investigación en la que Luis ha dejado probablemente una huella más profunda ha sido la que trata sobre Estado de Bienestar y políticas sociales comparadas. Luis creó y logró consolidar en el Instituto de Políticas y Bienes Públicos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, el Grupo de Investigación en Políticas y Estado de Bienestar (POSEB), al cual pertenecemos los autores de este breve homenaje.

Cuando hace unos meses nos pusimos a trastear sus aportaciones en este y otros ámbitos para escribir la introducción a un libro con el que 30 compañeros españoles y extranjeros queríamos homenajearle, nos dimos cuenta de que fue el esfuerzo de Luis el que consiguió situar al Estado de Bienestar español en la reflexión científica comparada, que hasta la mitad de los años 90 se había ignorado junto a otros de países del sur de Europa. Él contribuyó a poner en gran medida en el mapa conceptual el llamado régimen mediterráneo de bienestar, comenzando a trabajar con colegas extranjeros que asistían a encuentros en nuestro país y colaboraban en investigaciones y publicaciones.

Luis entendía el Estado de Bienestar como un elemento civilizatorio esencial de las sociedades contemporáneas. Estudió cómo las experiencias históricas de gobiernos autoritarios, el papel de la religión, la posición de la familia en la provisión del bienestar, los retrasos en la industrialización de estos países y en el desarrollo de sus sistemas de protección social conferían rasgos propios a los estados de bienestar mediterráneos Además, las reformas en las políticas sociales españolas propugnadas por Luis han constituido una fuente de inspiración para un amplio grupo de estudiosos y decisores políticos y han contribuido a dar forma a algunos de los programas universalizadores de la protección social que se han ido materializando en los últimos años.

En 2022, Luis Moreno fue reconocido con el Premio Nacional de Investigación en Ciencias Sociales. Estaba abrumado por ello y especialmente emocionado por que el jurado valorase su esfuerzo por trasladar su investigación a la sociedad, como efectivamente hacía con su excelente oratoria y su exquisita e irónica pluma. Luis no podrá recoger este premio pero estará en el recuerdo de sus colegas y amigos, en nuestro recuerdo, cuando su familia lo haga el próximo 1 de marzo.

Eloísa del Pino y Francisco Javier Moreno Fuentes son investigadores del Instituto de Políticas y Bienes Públicos (IPP-CSIC).