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Cómo introducir a tu negocio en el comercio electrónico en una semana

BBVA colabora con sus clientes de forma gratuita a través de un curso de diez clases que los ayuda a vender sus productos a distancia

Un hombre mira un producto en una tienda. Los comercios están volviendo a vender cada vez más en el desconfinamiento.
Un hombre mira un producto en una tienda. Los comercios están volviendo a vender cada vez más en el desconfinamiento. iStock

El comercio electrónico ha aumentado un 50% en España en relación a cifras previas al confinamiento por la covid-19, según datos de UNO, la patronal de empresas de logística. Vender a distancia no es una tarea sencilla. Miles de pequeños comercios han tenido que adaptarse en los últimos dos meses al entorno digital para poder generar ingresos. Desde un pequeño café como DOT, en el barrio de Arganzuela en Madrid, que toma pedidos a través de mensajes directos de Instagram hasta una carnicería boutique, como Bistec, en Pozuelo de Alarcón, que modificó la configuración de su datáfono para poder introducir los números de una tarjeta de crédito manualmente. Cada detalle cuenta.

Y no se trata solo de pedidos de alimentación, que se han multiplicado por cinco. Los de papelería han aumentado un 40%; productos veterinarios, un 54%; juguetería, un 100%, al igual que los materiales para pequeñas reformas del hogar. La demanda de productos deportivos, como pesas, máquinas y otros accesorios para mantenerse activo en casa ha crecido un 200%. Los propietarios han tenido que asimilar con urgencia la nueva realidad y recurrir a herramientas de aprendizaje. El BBVA, por ejemplo, organizó un taller a distancia para mostrar a los comerciantes en diez sesiones de 45 minutos cómo pueden promocionar sus productos en redes sociales o cuáles son las maneras más eficientes para cobrar por ellos.

Javier Urizar, director de Medios de Pago de BBVA, dice: “Teníamos cliente que necesitaban empezar a vender a domicilio. La principal duda, sin embargo, era: ‘¿Cómo cobro?” Pero no solo con aprender a cobrar se puede vender. “Los clientes tienen que enterarse de que pueden comprar a distancia y de los productos que se ofrecen”, indica Urizar, desde hace 14 años empleado de la entidad. “No pretendíamos que montaran su comercio online, sino que a través de las cosas que son de dominio público, con unas pautas claras y sencillas, pudieran estar vendiendo”, agrega. La idea era que entre un lunes y un viernes, a través de diez clases, sus productos ya estuvieran circulando.

Un hombre cobra con su datáfono en un restaurant.
Un hombre cobra con su datáfono en un restaurant.iStock

El curso ofrece tres pasos elementales a la hora de introducir un negocio en el entorno digital. El primero consiste en conocer los canales de venta digitales, como las redes sociales: Facebook, WhatsApp e Instagram. Luego hay que saber detectar cómo pagan los clientes a través de las alternativas de cobro a distancia, como Bizum, sistema para pagar inmediatamente a través de números de teléfono o Paygold, solución que ofrece BBVA, con la que el comercio puede enviar un SMS o correo electrónico con un enlace al comprador para que este complete el pago. Otro factor importante es aprender a resolver de forma adecuada las incidencias y devoluciones de productos. Por último, según el programa educativo de la entidad, es fundamental “potenciar la atención al cliente” para que su experiencia sea la mejor. En un entorno digital casi infinito es importante que los compradores no se vayan a otro sitio.

El comercio electrónico estaba ya creciendo a pasos de gigante en España. En el último trimestre de 2019, según los últimos datos ofrecidos por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, había alcanzado una facturación récord de 12.493 millones, un 23,5% más que en el mismo periodo de 2018. Claro que entonces pesaban las ventas de agencias de viajes y turismo que ahora están casi paralizadas. Desde UNO, advierten de que el aumento en el comercio electrónico este año no compensa la caída general producida por la crisis de la covid-19 en distintos sectores, como el hostelero, por ejemplo.

El programa formativo de BBVA intenta preparar desde cero a comercios que no estaban acostumbrados a moverse en el universo digital. “¿Cómo puede tu negocio iniciarse en la venta online en una semana?” es la primera clase, mientras que ya en la mitad del curso se resuelven dudas sobre cómo enviar los paquetes al comprador y también se muestran herramientas para dar mayor visibilidad al negocio, en buscadores como Google.

Formas de cobro a distancia

Las ayudas más sustanciales continúan siendo las distintas alternativas a las formas de cobro a distancia. A demás de Paygold, BBVA Smartpay es una app que se puede descargar desde Apple Store o desde Google Play y que permite tener el datáfono en el móvil para poder cobrar con él cuando se hace una entrega. Ya no es necesario introducir el pin de seguridad del cliente para compras que superan los 20 euros. Desde hace varias semanas, todas las entidades financieras españolas han decidido ampliar el límite a 50 euros.

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